La imagen de Cúcuta con el alumbrado público es la de una ciudad en decadencia, por la oscuridad que reina en varios sectores desde hace varios días, expresaron dirigentes comunales y comerciantes.

Tramos de la avenida Los Libertadores, el Canal Bogotá, el centro, Niza, la vía a Torcoroma y Alto Pamplonita, entre otros, están en total penumbra por las fallas en el servicio de alumbrado público.

Los vecinos denunciaron que la empresa cobra por un servicio que no presta, y pidieron que la alcaldía intervenga para que haga valer las pólizas de cumplimiento a la concesionaria Philips-Diselecsa, para que repare las fallas.

Juan Rangel, líder comunal de barrio Blanco, precisó que las deficiencias en el alumbrado público son generalizadas en la ciudad. “Si en los sectores céntricos estamos mal, ¿cómo será en los barrios apartados?”, se preguntó el líder.

Rangel dijo que se está dando una pésima imagen a los turistas y se está facilitando el accionar de los delincuentes, que encuentran el terreno perfecto para dar sus golpes en la oscuridad.

Líderes de las comunas 3, 4, 8 y 9 aseguraron que en esas zonas de las ciudadelas La Libertad y Juan Atalaya hay por lo menos 25 barrios sin servicio.

“Desde hace cuatro años nos vienen prometiendo alumbrado, pero no han cumplido”, expresó Juana Molina, vecina del sector de Los Olivos.

Similar situación se vive en zonas de la ciudadela Belén, donde los vecinos pasan las noches a oscuras.

En reciente control político a la empresa de alumbrado público, concejales le reclamaron al gerente de la compañía, Sergio Mora, porque en la administración de Donamaris Ramírez no se amplió la cobertura del alumbrado público (se mantuvieron las mismas 38 mil bombillas de la red).

Mora le dijo  a La Opinión que los inconvenientes en el servicio durante la Semana Santa obedecieron a fallas que desde ayer empezaron a superarse.

A las quejas de los vecinos, porque se cobra y no se presta de manera permanente el servicio, el directivo explicó que el alumbrado no es domiciliario, sino general. “El impuesto se cobra por el disfrute en toda la ciudad, por donde se movilice el ciudadano”.

Ante los reclamos porque no se amplía la cobertura, Mora dijo que la concesión tiene una cartera morosa de 10 mil millones, que no han cancelado empresas administradoras de los oleoductos de Ecopetrol, así como Oleoductos del Norte y Petróleos del Norte.

Con la actual Alcaldía hay planes de expansión, pero el grueso de los proyectos, incluida la reposición de alumbrado de escenarios deportivos, esperamos llevarlos a cabo con esta plata que nos deben, sentenció Mora.

*La Opinión