Con 16 años de vinculación académica y administrativa a la Universidad de Pamplona, Elio Serrano llegó a la rectoría de esa institución de educación superior y ya en la etapa final de su período, habla de la gestión cumplida.

¿Cuáles son los objetivos académicos prioritarios de la Universidad de Pamplona?

Lo que nos hemos propuesto en la Universidad de Pamplona es lograr la acreditación institucional. Esto lo hemos planteado como meta fundamental de esta gran familia académica.

¿Cree que la universidad responde a las necesidades del departamento, con respecto a su desarrollo productivo?

Estamos apuntando a eso porque somos conscientes de que no podemos estar de espaldas a la realidad de nuestra región. Nos empeñamos, con la oferta académica de la universidad para la formación de sus estudiantes, en estar siempre adelante.

¿En qué medida la universidad participa en los estudios y debates sobre los problemas y proyectos de la región?

Estamos trabajando en un programa de economía y participamos en un observatorio económico de la región. Nos vinculamos a las iniciativas de la paz, estudiamos planes de desarrollo, tratamos con los alcaldes sus proyectos productivos y soluciones para sus problemas. También hacemos presencia en los eventos relacionados con temas en los cuales  tenga cabida la universidad como motor del conocimiento. Todo cuanto jalone avance para el departamento y haga posible el mejor aprovechamiento de los recursos con que contamos, es de interés nuestro.

Están en marcha en La Habana las negociaciones entre el Gobierno y las Farc en busca de un acuerdo de paz. Se considera que el posconflicto será la oportunidad para consolidar  lo que se pacte en la mesa. ¿La universidad se ha preparado para lo que le corresponderá asumir?

Nosotros, igual que todas las universidades, estamos preparándonos para el posconflicto. Por eso, buscamos disponer de la más completa información de los acuerdos. Vamos a articular a nuestro establecimiento el programa Manos para la paz. A través de proyectos del Ministerio de Agricultura buscamos espacios  y oportunidades en el campo, y ya contamos con una fortaleza porque tenemos la maestría de Desarrollo, Paz y Resolución de conflictos. Están previstas otras actividades y esperamos llevar a cabo conversatorios relacionados con ese proceso de reconciliación.

¿Y cuál es el ánimo de docentes y estudiantes con respecto a la posibilidad de alcanzar la paz en Colombia?

Hay motivación en esta comunidad universitaria por la paz. Se busca una activa participación y el interés es el de avanzar. Se tiene claridad sobre los beneficios que traerá la paz para el país.

¿Qué tanto le preocupa el hecho de que las universidades oficiales de Norte Santander aparezcan de últimas en la clasificación nacional?

La Universidad de Pamplona no está en el último lugar, se encuentra en la mitad, pero es preocupante. Hay que hacer todo lo necesario para mejorar. En ese empeño se debe continuar. En 2014 contábamos con 17 grupos de investigación reconocidos por Colciencias. En el 2015 fueron 36, de los 58 que hay en el departamento. Avanzamos. Estamos mejorando los currículos y recuperando los programas. También, ampliando la oferta en especialización, maestría y doctorado. A eso le están apostando profesores y estudiantes.

¿En qué va la acreditación?

Venimos trabajando con el grupo de Acreditación Institucional, de docentes, administrativos y estudiantes. Se diseñó una Ruta de la Calidad que nos permite, organizadamente, hacerle seguimientos al proceso. Como primera medida, dentro de esta meta, estamos acreditando los programas en alta calidad, siendo este uno de los requisitos para lograrla. Durante 2015 presentamos seis programas para acreditación de alta calidad; en este año presentaremos nueve programas con el mismo fin.

¿Cómo está el presupuesto de la universidad?

El presupuesto presentado ante el  Consejo Superior fue de $104.000 millones, pero por recomendaciones del Ministerio de Educación Nacional se hizo una reducción de $11.000 millones. Esta reducción se debió a unos recursos de los que no se tiene certeza sobre su ingreso. Los rubros más representativos que se vieron afectados con la reducción fueron: vigilancia, aseo y prensa, entre otros. Para este año 2016 debemos lograr hacer una gestión productiva y redoblar esfuerzos en la búsqueda de recursos adicionales, para el normal funcionamiento de nuestra universidad.

¿Cuáles son los resultados de la investigación científica?

En estos tres años largos de administración, hemos obtenido resultados importantes: de los 66 grupos reconocidos por Colciencias a nivel del departamento, 36 son de la universidad. Esto demuestra que la Universidad de Pamplona es la institución que viene impulsando la investigación en Norte de Santander

¿Qué reformas o cambios considera necesarios en la educación superior de Colombia?

De lo que siempre hablamos es que la educación pública debe ser una educación de igualdad,  pero los recursos que gira el Gobierno Nacional no están siendo dados de tal forma. Hay universidades que tienen más recursos y otras como la de Pamplona, con más de 19.000 estudiantes presenciales, que no recibe los recursos suficientes.

Algunos sectores tienen la percepción de que en el manejo de la universidad hay más énfasis de política partidista que orientación académica. ¿Qué responde?

Invito a esas personas a que revisen dichos temas. Esta es la administración que más les ha dado la oportunidad a las personas que vienen trabajando a favor de la universidad en cada uno de los cargos, como pagaduría, presupuesto, prensa, almacén, la misma jefe de jurídica, entre otros. Ninguno se ha valido del poder político para su  vinculación.

¿Cuáles son sus diferencias con la que fuera su secretaria en la universidad?

Ninguna. Con la doctora Liliana (Parra) trabajamos durante tres años en forma mancomunada. Desafortunadamente decidió retirarse de la administración por problemas personales, por lo que se aceptó la renuncia en su debido momento.

¿Cómo se han superado los problemas que vienen desde cuando Álvaro González Joves fue rector?

Respeto mucho las políticas y decisiones que tomaron mis antecesores. No puedo hablar de los problemas que se presentaron porque será la justicia la encargada de determinar si cometieron errores o no. Por eso, no soy el más indicado para generar algún juicio. Lo que sí puedo decir, es que desde que se fundó la universidad, con el padre Faría, hasta el día de hoy, todas las decisiones que tomamos lo rectores, o por lo menos yo, las hacemos con el fin de buscar un beneficio para la universidad.

¿Es usted amigo de la reelección en el cargo que ocupa?

Creo que el tiempo lo dirá. Considero que son los docentes y principalmente los estudiantes los que determinarán si se reforma el estatuto de la universidad. Si se tiene en cuenta la reelección,  y si va a ser por una elección, bajo esos estamentos, estaré dispuesto, porque es una manera de validar todas las gestiones que he hecho como rector y todo el trabajo realizado con administrativos, docentes y estudiantes, pero será en su debido momento. El esfuerzo, la dedicación y las gestiones que he realizado, son las que me permitirán tomar una decisión en familia y de igual forma analizar cuál es la que más le conviene a la Universidad de Pamplona. Mientras tanto, solamente tengo un compromiso: estar hasta el 31 de diciembre de 2016 y esperar a que se den las cosas de la mejor manera, con la ayuda de Dios y la Santísima Virgen.