La Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia decretó medidas cautelares sobre un bien ubicado en cercanías de Cúcuta, al estimar que a pesar de diferentes procesos de venta, el mismo realmente es del exjefe paramilitar Jorge Iván Laverde Zapata, apodado ‘El Iguano’.

Se trata del predio llamado ‘Parcela 7 La Javilla’, en el corregimiento Aguaclara de Cúcuta, que estaba en posesión de Damaris Smith Tarazona y su esposo, quienes lo adquirieron por 300 millones de pesos el 12 de junio de 2013.

La Sala revocó una decisión contraria de la Sala de Justicia y Paz del Tribunal Superior de Bucaramanga, decretó las medidas y ordenó a la Fiscalía realizar la toma del mismo para que sea utilizado para reparar a las víctimas.

Según se conoció en audiencia pública, ese predio llegó a ser centro de las actividades ilegales del Bloque Catatumbo de las AUC.

El inmueble fue adquirido por ‘El Iguano’ en noviembre de 2002 con dineros ilegales. Luego el 17 de julio de 2004 fue transferido, según la documentación oficial, a María Dolores Durán Granados por parte del padre de ‘El Iguano’, Jorge Laverde Valencia a pesar que este falleció el 5 de septiembre de 2003.

De acuerdo con la Corte, “es evidente” que Durán Granados no obtuvo el predio con dineros propios. Luego, el terreno fue comprado por 60 millones de pesos a Leonardo Fabio Barrera, quien desde 2009 integraba la banda criminal ‘Los Rastrojos’. Finalmente, el predio pasó a manos de Smith Tarazona.

Para la Corte, la influencia de las Autodefensas en la zona era de dominio público por lo que “no es admisible la posición de los compradores respecto a que desconocían al circunstancia”.
“Se puede concluir que la titularidad del bien, real o aparente, corresponde al postulado o al grupo armado al margen de la ley al cual pertenecía”, concluyó la Sala.

Bogotá | Colprensa