Con cinco victorias contundentes en su haber, Donald Trump reforzó su posición al frente de las primarias republicanas y se acercó un poco más a unas elecciones generales contra Hillary Clinton.

La favorita demócrata tiene ya el 90% de los delegados necesarios para obtener la candidatura de su partido a la presidencia, tras cuatro victorias claras en las primarias del martes.
 
La carrera republicana se centra ahora en Indiana, donde las primarias de la semana que viene ofrecerán una de las últimas oportunidades del senador de Texas Ted Cruz para frenar a Trump y que el candidato del partido se decida en la convención republicana de julio.
 
Aunque Trump necesita seguir ganando si quiere obtener la candidatura antes de la convención, el martes afirmó ser el "presunto candidato" tras conocer sus cinco victorias en las primarias de la jornada.
 
"Se ha acabado. En lo que a mí respecta se ha acabado", declaró. El magnate de los bienes raíces suma ya el 77% de los delegados necesarios.
 
Trump tenía previsto viajar el miércoles a Indiana tras ofrecer un discurso de política exterior en Washington. Su intervención en un hotel céntrico es la primera en una serie de charlas previstas del favorito republicano en las últimas semanas, dirigidas a calmar las preocupaciones de los estadounidenses sobre su preparación para ser presidente.
 
También Clinton estaba deseando centrarse en Trump. Aunque los asesores de la exsecretaria de Estado dijeron que no subestimarían a Trump, como hicieron muchos de sus ya descartados rivales republicanos, su campaña ve una oportunidad no sólo de implicar a los demócratas en el esfuerzo por mantener al magnate fuera de la Casa Blanca, sino también de ganarse a los republicanos recelosos ante la agresiva retórica del empresario.
 
"Si usted es un demócrata, un independiente o un republicano reflexivo, usted sabe que el enfoque de ellos no va a construir un Estados Unidos en el que incrementemos la oportunidad o disminuyamos la desigualdad", dijo Clinton respecto a los precandidatos del partido Republicano.
 
Trump ganó en Connecticut, Delaware, Maryland, Pennsylvania y Rhode Island. Clinton sólo perdió en Rhode Island ante el senador de Vermont Bernie Sanders.
 
Sanders, en una entrevista con The Associated Press, admitió que tiene un "sendero muy estrecho y vamos a tener que lograr algunas victorias grandes".

 
En la carrera republicana, Cruz y el gobernador de Ohio, John Kasich, luchan por forzar una convención abierta. Los dos aspirantes han formado incluso una poco habitual alianza para coordinarse en las próximas primarias para intentar minimizar los delegados que consigue Trump.
 
Pero ese esfuerzo hizo poco por impedir un buen resultado del favorito en el nordeste del país, donde se hizo con al menos 105 de los 118 delegados en juego. Ahora suma 950 de los 1.237 delegados necesarios para asegurar la candidatura.
 
Cruz pasó el martes en Indiana, donde la campaña de Kasich se ha retirado en un intento de dejar vía libre al senador de Texas.
 
"La campaña vuelve esta noche a terreno más favorable", dijo Cruz durante un acto por la noche en Knightstown, Indiana.

 
Trump ha criticado la cooperación de sus rivales, que ha descrito como "un pacto fallido", y afirmado que esos esfuerzos por forzar una convención abierta demuestran que el proceso de nominación está amañado a favor de aspirantes con contactos en el partido.

Washington | AP