El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, mantendrá su programada visita de cuatro días al Reino Unido a fines de esta semana, dijo la Casa Blanca, cuando el gobierno de Theresa May peligraba por las renuncias de dos ministros euroescépticos.

"El presidente mantiene su expectativa por su visita de trabajo con la primera ministra el 13 de julio y por fortalecer aún más la relación especial entre Estados Unidos y el Reino Unido", declaró a periodistas la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Sarah Sanders.

El ministro de Relaciones Exteriores británico, Boris Johnson, y el ministro encargado de la salida del Reino Unido de la Unión Europea, David Davis, dimitieron este lunes por sus diferencias con Theresa May sobre sus planes para un futuro de Gran Bretaña fuera del bloque, poniendo en peligro la continuidad de la primera ministra.

Luego de una cumbre de la OTAN en Bruselas, Trump tiene previsto llegar el jueves a Reino Unido para una visita de cuatro días, en la que prevé discutir con May las perspectivas de un acuerdo de libre comercio entre Reino Unido y Estados Unidos después de la salida británica de la UE.

Acompañado por la primera dama Melania Trump, el líder estadounidense se mantendrá alejado de Londres durante una gira que se espera haga salir a las calles a decenas de miles de manifestantes.

El viernes Trump tiene previsto reunirse con May en Chequers, la casa de campo de los primeros ministros británicos, y trasladarse al Castillo de Windsor para encontrarse con la Reina Isabel.

El viaje de Trump también lo llevará a Oxfordshire, cuna del líder británico en tiempos de guerra Winston Churchill, y a Escocia, hogar de su difunta madre, donde el mandatario estadounidense posee dos campos de golf de lujo.