El papa Francisco recibió este lunes al arzobispo de Lyon, el cardenal Philippe Barbarin, después de que este anunciase que presentaría su renuncia al haber sido condenado en Francia por haber encubierto los abusos sexuales a menores de un sacerdote de su diócesis.

Barbarin, de 68 años y al frente desde hace 17 de la archidiócesis de Lyon, fue condenado el pasado 7 de marzo y ese mismo día avanzó que acudiría al Vaticano para presentar su renuncia ante el papa, aunque sin especificar si también pediría ser excluido del Colegio cardenalicio.

Por el momento, el Vaticano solo informó de que ha tenido lugar el encuentro, lo que indica que el papa Francisco se tomará tiempo para su decisión sobre la renuncia como arzobispo de Barbarin.

El cardenal se sentó en el banquillo en enero junto a otros cargos eclesiásticos acusados de no haber denunciado los abusos cometidos contra menores durante 25 años por el cura Bernard Preynat.

Además de la pena de cárcel, que Barbarin solo tendría que cumplir en caso de reincidencia, deberá pagar una indemnización simbólica de un euro a ocho de las víctimas de Preynat que lo habían denunciado.

El purpurado ya ha anunciado que recurrirá la sentencia.