Estados Unidos prevé acoger en 2016 a 85.000 refugiados, entre ellos 10.000 sirios, y a otros 100.000 en 2017, anunció este domingo el secretario de Estado norteamericano John Kerry durante una visita a Berlín.

"Prevemos acoger a 85.000 –refugiados-, de los que al menos 10.000 serán de Siria, durante el próximo año. Y durante el año fiscal siguiente -octubre de 2016 a octubre de 2017- llegaremos a los 100.000", declaró ante la prensa tras entrevistarse con su homólogo alemán, Frank-Walter Steinmeier.

En el año fiscal que finaliza en setiembre de 2015, la mayor economía del mundo habrá recibido a 70.000 refugiados.

Washington ha sido muy criticado por estas cifras, consideradas pequeñas en comparación al 1 millón de refugiados sirios que Alemania espera acoger este año.

Kerry dijo que a Estados Unidos "le gustaría acoger a más" pero se ve limitado por regulaciones de seguridad adoptadas tras los atentados del 11 de setiembre de 2001 en Nueva York.

"Tras el 11/09 tenemos nuevas leyes, la verificación de antecedentes lleva mucho tiempo y no podemos acortar caminos", señaló.

Apoyo militar de Rusia a Siria “es contraproducente”
       
John Kerry indicó que el apoyo militar de Rusia al gobierno sirio puede atraer a más extremistas al país y dañar los esfuerzos de paz. Expresó que con su homólogo alemán que ambos están de acuerdo en que "un apoyo militar sostenido al régimen por parte de Rusia o de cualquier otro país podría atraer a más extremistas y fortalecer a Al Asad, obstaculizando el camino para una solución".

Washington ha expresado su preocupación por el aumento de la presencia militar de Rusia en Siria y el temor de que pueda fortalecer al régimen de Bashar Al Asad.

Por su parte, Moscú argumenta que el apoyo militar se reduce a contratos ya existentes, aunque hay informaciones de que ha habido despliegues secretos de tropas en una base naval de la era soviética.

El viernes, el portavoz de Putin señaló que Moscú iba a considerar cualquier petición de envío de tropas por parte de Siria.

Berlín | AFP