Formulario de búsqueda

-
Lunes, 26 Agosto 2019 - 12:08am

El Carnaval de La Habana recibe una inyección de vitalidad

Una fiesta que recobra fuerza este año, por la celebración de los 500 años de la ciudad.
AFP
Como dato histórico se recuerda el año 1959 cuando Fidel Castro prohibió el uso de mascaras para evitar que su presidencia, recién asumida, fuera saboteada.
/ Foto: AFP
Publicidad

Víctor Marrero lleva la mitad de la vida maquillándose cada agosto para bailar en el Carnaval de La Habana, una fiesta que perdió la fastuosidad de sus orígenes pero que este año, por la celebración de los 500 años de la ciudad, recibe una inyección de vitalidad.

Marrero, de 89 años, el Tata Cuñengue, es el bailarín más antiguo en actividad del carnaval capitalino.

 Integra la comparsa El Alacrán, que data de 1908 y es la más vieja de una fiesta que se remonta al inicio de la colonia.

“Llevo 40 años, más de 40 años de Tata Cuñengue y sigo bailando como el brujo en la comparsa de El Alacrán”, cuenta, mientras tiñe su rostro de negro, frente a un espejo, ayudado por sus hijas.

El Tata Cuñengue es un viejo brujo en la Regla Conga o Palomonte, un culto religioso africano.

Cuenta la leyenda que, en un día de corte de caña de azúcar de esclavos, una mujer negra fue picada por una alimaña en pleno trabajo. Todos acudieron al Tata.

El brujo, tras lanzar conchas de caracol en el suelo y hacer una adivinación, determinó que se trataba de un alacrán al que, acto seguido, salieron a darle muerte, curaron a la mujer y celebraron. La historia es escenificada por la comparsa.

Una fiesta de humanos    

No es faraónico como el Carnaval de Rio de Janeiro ni elegante como el de Colonia en Alemania. El Carnaval de La Habana es más bien intenso, con ritmos y movimientos que son frutos maduros del árbol genealógico africano.

Tampoco lleva máscaras. En los inicios de la revolución de Fidel Castro, en 1959, fueron prohibidas para evitar sabotajes de opositores disfrazados.

La tradición se perdió

Es callejero y hierve con el calor del verano caribeño. Está sazonado con cerveza, ron y hedores humanos que superan la capacidad de los baños públicos. Y con una alegría que, para ojos foráneos, podría ser exagerada si no fuese tan simple y auténtica.

La gente disfruta, filma con sus celulares, canta. Los bailarines lo entregan todo. Por momentos, sus movimientos parecen ser resultado de una posesión del mas allá.

La fiesta se apodera del tradicional Malecón. Se colocan tribunas en ambos lados de la vía y por el centro circulan carrozas, donde se montan los bailarines. Los parlantes emiten salsa, conga, rumba, pero también reguetón. 

Claudia, de 53 años, viene de La Víbora, otro barrio de clase media devenido popular. 

“Vengo al Carnaval, me gusta mucho, me divierto. Todos los cubanos lo esperan”, dice.

Familias acompañan el recorrido de las carrozas y también esperan el baile de las comparsas

Además de El Alacrán están Los Guaracheros de Regla, la primera comparsa aparecida después de la revolución  y Las Voluminosas, integrada por gruesas mujeres, y otras varias.

500 años, nuevos tiempos    

“El Alacrán es una comparsa de principios del siglo XX. Tenemos que mantener la tradición porque es la comparsa más vieja, la decana de La Habana”, dice Santos Ramírez, Santi, 46 años, director de esta agrupación.

Conservan la esencia africana y representan a las deidades orishas del panteón Yoruba, como Yemayá, Obatalá y Changó. Las comparsas reciben apoyo estatal para sus indumentarias.

Santi heredó el mando tras la muerte de su padre. Antes la dirección la tuvo su abuelo y, antes de él, su bisabuelo, miembro fundador de esta comparsa.

En aquella época los bailarines de El Alacrán eran blancos. 

El único negro era el bisabuelo de Santi. Por eso Tata Cuñengue se pinta el rostro como en sus inicios, para representar a los esclavos negros.

Ahora, la compañía de Santi tiene casi en su totalidad a afrocubanos.

“El Carnaval se ha mantenido gracias a los habaneros, necesitamos rescatar a la juventud que ha perdido el entusiasmo a la Conga, a la comparsa y ha habido una intrusión del reguetón y otros géneros foráneos”, detalla.

“Estamos llevando la comparsa al siglo XXI, más dinámica, más atractiva. Tengo muchachos jóvenes desde los 15 a los 35 años. El más viejo soy yo y Tata Cuñengue”, explica Santi.

“Es una tradición familiar. La música, el ritmo, los bailes populares, esa tradición no se puede perder”, dice la bailarina Esther de la Caridad, de 20 años.
El Tata, por su parte, está listo.  “¿Qué espera de este carnaval? “Bailar y no hacer el ridículo”.

AFP

@AFPespanol

Agence France-Presse es la agencia de noticias más antigua en el mundo.

Ayúdanos a seguir haciendo periodismo de calidad

Contribuye aquí
Publicidad
Suscríbete y recibe las últimas noticias de La Opinión

Comentarios

Publicidad
Publicidad
Economía
Artículo

Duque sostuvo encuentro con Lenín Moreno en la frontera

El mandatario sostuvo conversaciones con Lenín Moreno sobre diferentes temas.

Colprensa
Publicidad
Judicial
Artículo

Antes de morir, Ana Benilda Becerra salvó a sus vecinos

Un cortocircuito provocó la tragedia en el barrio La Castellana.

Archivo / La Opinión
Cúcuta
Artículo

La avenida del Río será más deportiva y familiar

El centro de pensamiento del Área Metropolitana tiene unos 61 proyectos estructurados para Cúcuta.

Cortesía/La Opinión
Publicidad
Pamplona
Artículo

COVID-19, en aumento en la región de Pamplona

Se conocen casos de gente de los municipios de la provincia y de Toledo que llegan a la región a hacerse la prueba de coronavirus. 

Roberto Ospino / La Opinión
+ Deportes
Artículo

La delegación regional que estará en la Vuelta al Táchira 2021

Tres equipos representarán a Norte en la edición 56 de esta clásica del continente. 

Cortesía
Publicidad
suscripciones
Publicidad
Judicial
Artículo

La muerte sigue rondando por La Parada

Jonathan José Seijas llegó hace unos meses a La Parada a trabajar pasando gente y mercancía por las trochas.

Cortesía
Cúcuta
Artículo

Desde hoy, alcaldía empieza a expedir paz y salvo de predial

La Secretaría de Hacienda informó que en esta oportunidad el documento se entregará mucho más pronto que años anteriores.

Archivo/La Opinión
Publicidad
Cúcuta
Artículo

Tercer toque de queda se cumplió dentro de lo presupuestado

En total fueron impuestos 843 órdenes de comparendo en la ciudad y el área metropolitana.

Cortesía / La Opinión
Ocaña
Artículo

La pandemia obliga a postergar los retiros espirituales

“No existen condiciones para el encuentro", Jairo López, presbítero de la catedral de Santa Ana.  

Archivo / La Opinión


Es el primer portal gastronómico de Norte de Santander, donde se resalta lo mejor de los sabores regionales, nacionales y mundiales.
Nuestros suscriptores cuentan con su propio espacio con privilegios y beneficios. Aqui puedes hacer parte de este selecto club.
Un espacio dedicado a las variedades y lo más impactante del mundo del entretenimiento. Encuentre aquí los personajes e historias.
La labor investigativa de nuestro equipo periodistico se congrega en esta sección dedicada a mostrar a profundidad y con más detalles de los hechos.
En este espacio nuestros clientes podrán promocionar su negocio o encontrar una propuesta que se adapte a sus necesidades.