Su tiquete de regreso de Nueva York a Bogotá tenía agendada la fecha del 31 de marzo de 2020. Ya pasó casi un mes y no ha podido tomar ese vuelo. A Carlos Sarmiento la pandemia del coronavirus lo atrapó de paseo cumpliendo el sueño de pasar unos días en la gran manzana de Estados Unidos, una ilusión que se convirtió en pesadilla.

Cuando el Gobierno de Iván Duque en Colombia anunció el cierre de fronteras y del espacio aéreo para prevenir más casos de coronavirus importados, Sarmiento no tuvo tiempo de reaccionar. Llamó a la aerolínea y ya los vuelos estaban cancelados y no estaba claro cuando los habilitaría: su camino de regreso a casa comenzaba a cerrarse.

Desde entonces una habitación en renta en el distrito de Queens es su centro de cuarentena mientras espera un vuelo humanitario de Nueva York a Colombia. Solo sale si necesita comida, al mercado o a uno de los colegios que el Estado dispuso para brindar alimentos a las personas que no tienen cómo abastecerse porque la pandemia los adentró en una crisis.

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Dar un paso afuera de ese cuarto compartido, con dos camas individuales, cortinas azules y una maleta esperando tomar vuelo, es un peligro de contagio: en el Estado los contagios de coroanvirus superan los 263 mil y la cifra de víctimas mortales está por sobrepasar la barrera de los 17 mil, según las cifras que muestra este viernes (24 de abril) Johns Hopkins University.

“Me estoy financiando con lo que tenía. Lo logré estirar unos días, pero ya se me acabó el dinero y he tenido que salir a pedir alimento o llamar al 311, la línea en la que te entregan comida gratis. Uno puede salir, ir a bancos de comida, pero estar en la calle es exponerse”, relata.

Los colombianos atrapados en Nueva York

Con una publicación en un grupo de Facebook empezó a buscar a otros colombianos que, como él, estaban en viajes temporales en Nueva York cuando cerraron la frontera. Al principio se contactó con 20 connacionales y ya son más de 90.

Diego Valencia es uno de los colombianos que respondió al mensaje de Carlos. Llevaba un poco más de tiempo en Nueva York y la cuarentena lo atrapó. Llegó el 23 de enero y su retorno era esta semana, el 22 de abril, pero no pudo abordar el vuelo.

“Hemos tratado de hablar con el consulado de Colombia y no tenemos respuesta efectiva. Nos dicen que Nueva York es un caso especial. Estamos esperando un vuelo humanitario y ayudas humanitarias porque las cosas acá están muy complicadas y el Gobierno no nos ha dado apoyo. Estoy de turista, el dinero se acaba poco a poco y la estadía es costosa”, dice Diego.

Él es estudiante. Su renta estaba pagada hasta esta semana y ya está buscando quién le dé un techo porque el dinero que le queda es finito. Sus ahorros están en pesos y la contingencia del coronavirus elevó el precio del dólar a más de 4 mil pesos, un precio difícil de pagar desde Colombia con el cambio de moneda.

Por una “sorpresa”, una decisión que los apresó de imprevisto, dicen, Carlos y Diego quedaron atrapados en sus habitaciones temporales dentro de la burbuja de Nueva York, el Estado hacia el que todo el mundo mira con temor al contagio. Sin vuelo humanitario no saben cuándo regresarían porque el cielo de Colombia está cerrado mínimo hasta finales de mayo.

El Gobierno dice que está siguiendo la situación de los connacionales en el exterior y que se están gestionando vuelos humanitarios para los colombianos que estaban en viajes temporales por negocios o turismo cuando se cerraron las fronteras de Colombia por el coronavirus.

Carlos critica esa medida. “Es una repatriación humanitaria que están cobrando. No sé qué tan humanitario sea que las personas que estamos en peligro en esta ciudad tengamos que pagar un vuelo por nuestra seguridad”, sentencia.

Las gestiones de Colombia para sus ciudadanos en el exterior

El trabajo de la Cancillería, Migración Colombia y el Ministerio de Transporte, articulado con consulados y embajadas, ha traído permitido el aterrizaje de trece vuelos humanitarios en los que regresaron al país 1.063 connacionales. Desde La Florida y Houston, en Estados Unidos, se han efectuado itinerarios hasta Bogotá.

Otros destinos de Perú, Panamá, República Dominicana, entre otros, también han tenido este tipo de atención del Gobierno. Cuando la ciudad de Wuhan en China fue el epicentro del coronavirus, en ese entonces considerado una epidemia y no una pandemia, un avión de la Fuerza Aérea rescató a las personas que estaban allá.

Pero los últimos vuelos humanitarios tienen la característica de que son los viajeros los que deben pagar por los trayectos porque se trata de trayectos comerciales. El Gobierno le da el calificativo de humanitario teniendo en cuenta que se otorga el permiso para su arribo al país por una condición excepcional.

Además, las personas que los aborden deben asumir el compromiso de cumplir una cuarentena de dos semanas en la primera ciudad en la que aterrice el avión, que suele ser Bogotá. Así las cosas, si un viajero es de Medellín o Cali tendría que buscar un hotel o un lugar en alquiler por ese lapso para tener dónde quedarse, un costo que también debe asumir por su cuenta.

El Gobierno habilitó el registro de los connacionales varados en el exterior en la plataforma de Cuéntanos cómo estás y también en los consulados. En un comunicado del pasado jueves, la Cancillería recordó que “las repatriaciones que se están gestionando son de grupos de colombianos que son viajeros temporales por turismo o negocios”.

Es decir, ese tipo de medida está cerrada, por ahora, para personas que residían en el exterior. Para los que estén por fuera del país y necesiten respaldo, agregan, se están enviando recursos a los consulados para que sean atendidos.

Hemos comenzado a enviar recursos a algunos países, entre ellos Perú y Ecuador: Canciller Claudia Blum en @comisionprimera

— Cancillería Colombia (@CancilleriaCol) April 22, 2020