Según informaciones del canal francés Bfmtv, más de 100 rehenes fueron asesinados en el teatro Bataclan de París, donde las fuerzas de seguridad lanzaron un asalto para rescatar a los rehenes y abatieron a dos atacantes a primeras horas del sábado (en París).

Los atentados se presentaron en varias zonas de París y empezaron en la noche del viernes. El primer tiroteo ocurrió en el décimo distrito, seguido de dos o tres explosiones fuera del estadio nacional Stade de France, las cuales dejaron al menos tres muertos y 10 heridos, cuyo estado es grave.

El segundo tiroteo se registró en un teatro en el undécimo distrito de París. De acuerdo con una fuente policial, se tomaron rehenes dentro del teatro, los cuales fueron asesinados por los atacantes.

Ante los hechos ocurridos, el presidente de Francia, Francois Hollande, declaró el estado de excepción en el país y ordenó cerrar su fronteras.

Tras la ola de atentados, varios líderes del mundo mostraron su solidaridad con el pueblo francés. El primero de ellos fue el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, quien condenó los letales ataques y señaló que su país está listo para apoyar al gobierno de Francia.

El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, también condenó "los despreciables ataques terroristas perpetrados en varios lugares de París y sus alrededores" y exigió "la inmediata liberación de los numerosas personas que fueron tomadas como rehenes".

*París (Colprensa-Agencia Xinhua)