El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, dijo el lunes que luchará para que el resto de Sudamérica no experimente lo mismo que Venezuela, durante un seminario en Miami donde buscó ganar la confianza de los inversores en un contexto de crisis bursátil mundial por el coronavirus.

Citando la "degradación moral y política" que padece Venezuela, el presidente ultraderechista destacó la importancia de "luchar para que otros países de nuestra América del Sur no experimenten lo que están experimentando, lamentablemente, nuestros hermanos venezolanos".

Bolsonaro abrió con estas palabras un Seminario Empresarial Brasil-EEUU en el centro de Miami, donde garantizó a los empresarios locales que "la desconfianza" hacia Estados Unidos que caracterizó a los gobiernos brasileños anteriores, "cambió".

Se refería a las políticas de los sucesivos gobiernos de izquierda de Luis Inácio Lula Da Silva y Dilma Rousseff, quien fue removida del cargo en 2016.

Apodado "el Trump del Trópico", Bolsonaro también dio un espaldarazo a su ministro de Economía, Paulo Guedes, quien está bajo presión por la desaceleración del crecimiento económico en 2019 (1,1%), el impacto del coronavirus y la caída de los precios de petróleo.

Los temores por el virus COVID-19 provocaron este lunes un nuevo desplome de las bolsas mundiales, entre ellas la de Sao Paulo, con una caída de 10%.

"Tenemos en el ministro de Economía un hombre conocido dentro y fuera del país", dijo Bolsonaro, "y somos leales a sus políticas económicas y buscamos implementarlas de todas las formas".

Con la visita a Florida y el encuentro el sábado con el presidente estadounidense, Donald Trump, "estamos mostrando que vamos por buen camino", insistió.

Trump y Bolsonaro discutieron en privado la crisis venezolana y luego reiteraron su apoyo al líder opositor Juan Guaidó, a quien reconocen como presidente encargado al considerar ilegítimo el gobierno de Nicolás Maduro.

El domingo, Bolsonaro firmó un acuerdo de defensa que abre la vía para el intercambio de suministros militares entre ambos países.

En Caracas, Maduro acusó el viernes a Washington de fraguar planes contra su gobierno con la ayuda de Colombia y Brasil.

El presidente colombiano, Iván Duque, también se reunió con Trump la semana pasada.

Este lunes, Bolsonaro fue recibido en el seminario por Marco Rubio y Rick Scott, dos senadores republicanos por Florida con gran influencia en la política de la Casa Blanca hacia Venezuela.

Guaidó convocó a una protesta masiva el martes contra Maduro, en una manifestación que buscará ser contrarrestada por otra marcha del oficialismo.