El grupo yihadista Boko Haram ha ejecutado públicamente a ocho personas que se oponían a la aplicación rigorista del islam en el nordeste de Nigeria, según un vídeo al que tuvo acceso la AFP.

Las víctimas, con los ojos vendados, están tumbadas boca abajo. Cuatro hombres armados y enmascarados las asesinan a quemarropa, mientras una muchedumbre exultante observa la escena infame.

Justo antes de la ejecución, un hombre con turbante blanco dice a la multitud que los vecinos condenados son "apóstatas que abandonaron el islam". 

"Estas personas no son diferentes de los milicianos que luchan contra nosotros, de los espías y de los soldados nigerianos", añade el hombre no identificado en lengua hausa, uno de los idiomas más hablados en el norte de Nigeria y en la región del Chad.

Los lugareños desafiaron a la "policía de la sharía" (los miembros de Boko Haram que garantizan la aplicación de una interpretación estricta de la ley islámica) y amenazaron con luchar, afirma el hombre del turbante, advirtiendo que quien ose desafiar a los yihadistas correrá la misma suerte.

Se desconoce cuándo y dónde se grabaron las imágenes, pero la vegetación frondosa parece indicar que fue durante la actual temporada de lluvias.

El vídeo exhibe otros castigos como una lapidación hasta la muerte por adulterio o una decapitación por narcotráfico, amputaciones por robo y una flagelación por consumo de alcohol.

El mensaje de Boko Haram parece destinado a contradecir al ejército nigeriano, que asegura que los yihadistas están a punto de ser derrotados.

El grupo, que juró lealtad al Estado Islámico, anunció la creación de un califato en agosto de 2014, tras haberse apoderado de territorios extensos de nordeste de Nigeria. Desde 2015, varias operaciones de las tropas nigerianas y de sus vecinos (Camerún, Chad, Níger) lo han debilitado, pero sigue activo.