Ximena Quijano Hernández y José Antonio Parada Cerpa, estudiantes de Medicina de origen colombiano, son dos de las víctimas de un cuádruple homicidio ocurrido el pasado fin de semana en el estado de Puebla, México. 

Los dos jóvenes, de 25 y 22 años de edad respectivamente, fueron encontrados sin vida en jurisdicción del municipio de Huejotzingo junto a los mexicanos Francisco Javier Tirado Márquez, de 22 años y también estudiante, y Josué Emanuel Vital Castillo, de 28 años de edad, el conductor de Uber que los transportaba. 

Angélica Cerpa, la mamá de José Antonio, indicó a Semana que los universitarios habían asistido al carnaval de esa municipalidad. Sobre las 9:30 de la noche del domingo se comunicó con su hijo, quien le dijo que estaba en la casa de un amigo y tomaría un Uber.

Sin embargo, fue la última vez que tuvo contacto con él. "Estuve siguiendo por el GPS de su celular y nunca salieron del sector. Estuve marcándoles, pero no contestaban", relató. 

Los cuerpos de las cuatro víctimas fueron hallados sobre las 10:00 de la mañana de este lunes, indicaron las autoridades. Las personas presentaban heridas por impactos de armas de fuego, indicó el medio local MTP Noticias. 

A través de un comunicado, la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (Upaep) expresó su "indignación y preocupación por la escalada de inseguridad y violencia que vive nuestro estado y nuestro país, que condena a las familias a vivir en una constante zozobra e incertidumbre". 

La institución confirmó que los dos estudiantes colombianos estaban de intercambio y desde agosto pasado prestaban servicio en el Hospital General de Cholula. Ambos provenían de la Fundación Universitaria Sánitas, de Bogotá. 

"Como comunidad universitaria ofrecemos nuestra solidaridad a las familias Quijano Hernández y Parada Cerpa, a sus compañeros y amigos, a quienes les aseguramos, desde ya, toda la cercanía, tanto física como espiritual", indicaron, al tiempo que exigieron a las autoridades "la aplicación de la ley en forma pronta y expedita, para garantizar que no exista impunidad y que recuperemos la confianza". 

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Por su parte, la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, Buap, institución en la que estudiaba Francisco Javier Tirado, también lamentó el hecho. 

"La Buap hace pública su indignación por el asesinato de nuestro compañero Francisco Javier Tirado Márquez, etudiante de la Facultad de Medicina y quien realizaba su servicio social. Francisco Javier fue una de las víctimas de la inseguridad que prevalece en el estado", indicaron. 

La institución también exigió el pronto esclarecimiento del hecho y que "se aplique todo el peso de la ley a quienes resulten responsables". 

Al respecto, la Fiscalía General del Estado de Puebla informó que por el hecho hay tres presuntos implicados detenidos y un vehículo asegurado.