Líderes mundiales reafirmaron este viernes su compromiso de evitar que las armas nucleares caigan en manos de yihadistas pero advirtieron que esa amenaza "evoluciona constantemente".

"Se necesita más trabajo para prevenir que los actores no estatales obtengan materiales nucleares y radioactivos, que podrían ser usados para propósitos maliciosos", indicaron los mandatarios y jefes de gobierno de medio centenar de países, en una declaración conjunta al cierre de la Cuarta Cumbre sobre Seguridad Nuclear en Washington.

Los dirigentes discutieron planes para garantizar la seguridad de los inventarios de combustible nuclear y material radioactivo que pudieran ser usados por grupos yihadistas para fabricar un arma nuclear o al menos una 'bomba 'sucia'.

"Reafirmamos nuestro compromiso de metas comunes sobre desarme nuclear, no proliferación nuclear y uso pacífico de la energía nuclear", señala la declaración de los países.

Al considerar la seguridad nuclear una "duradera prioridad", los dirigentes mundiales se comprometieron "a promover un ambiente internacional pacífico y estable reduciendo la amenaza del terrorismo nuclear".

Adjuntas a la declaración, había cinco "planes de acción" diseñados para mejorar la coordinación de estados miembros de organismos internacionales, como la Agencia Internacional de Energía Atómica y la agencia policial Interpol.

Washington | AFP