“Yo sabía que me iban a capturar o que me mataban”. Así, Edwin Armando Ossa Aranguren, de 25 años, agradeció que la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc) lo capturara, porque entendía que “todavía no era el momento para morirme”.

Las confesiones de este hombre conocido como Sosa, miembro del Clan del Golfo, en medio de la rueda de prensa en la que fue presentado por la Policía, daban cuenta de su trayectoria delictiva que terminó luego de que miembros de la Seccional de Investigación Criminal (Sijín) de la Mecuc lo capturaran en la calle 21 con avenida séptima del barrio Ospina Pérez.

Ossa Aranguren tenía una orden de captura por el delito de concierto para delinquir agravado expedida por el Juzgado Primero con control de garantías y tramitado por la Fiscalía 70 Especializada Contra el Crimen Organizado de Cúcuta.

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Según las investigaciones, 'Sosa' pertenecía al Clan del Golfo desde el 2016; delinquía en el barrio El Callejón, y era el encargado de cobrar extorsiones en las trochas ubicadas en el sector de Santa Cecilia, del corregimiento de San Faustino.

Además, reemplazó a Arley o El Paisa, cabecilla urbano de esta organización.

Sosa también se encargaba del microtráfico y de ordenar homicidios desde la comuna siete.