Un choque entre dos motocicletas se produjo en una vereda del corregimiento de Buena Esperanza.

Con una corta oración en medio de dos cuerpos tirados en la vía que conduce a la vereda Los Reyes, en el corregimiento de Buena Esperanza, un párroco de la zona le dio el último adiós a Edwin González Ramírez, de 24 años, quien falleció al chocar dos motocicletas.

González, residía en la vereda Alto Viento, en zona rural de Cúcuta, y se dedicaba a la venta ilegal de combustibles. El sábado a eso de las 3:20 de la tarde, cuando se dirigía en una moto Empire venezolana sin placas a descargar unas pimpinas de ACPM en la vía que conduce a la vereda Los Reyes se chocó contra otro pimpinero de origen venezolano que se movilizaba en una motocicleta de las mismas características, y sin matrícula alguna.

González murió de manera inmediata por el impacto. La pierna derecha quedó completamente destrozada desde la altura de la rodilla hasta el tobillo.

El otro pimpinero accidentado, estaba indocumentado en el momento del accidente y solo se conoce que es un menor de edad llamado Adrián, y que fue trasladado de inmediato al Hospital Universitario Erasmo Meoz en Cúcuta.

Sufrió trauma craneoencefálico severo y múltiples heridas en el muslo, razones por las cuales permanece bajo pronóstico reservado en el centro asistencial.

Las primeras hipótesis policiales apuntan a que el accidente fue provocado por exceso de velocidad e invasión de carril por parte de alguno de los dos motociclistas.

El padre de González aseguró que los gasolineros frecuentan estas trochas a altas velocidades para evadir los controles policiales.

González era el menor de tres hermanos, estudió hasta octavo grado y convivía con su pareja quien quedó con cuatro meses de embarazo.