Los lamentos y las lágrimas no cesaban la tarde de este lunes en la calle 12 con avenida 14, del barrio El Contento, donde los violentos volvieron a dejar su huella. Allí, fue atacado a balazos Daniel Augusto Rodríguez Mogollón, quien murió de manera inmediata.

La detonación de dos disparos y el sonido de una motocicleta huyendo del lugar, fueron el presagio de que algo había ocurrido en este popular sector de la ciudad.

Cuando los vecinos se asomaron para percatarse qué había pasado, vieron el cadáver de Rodríguez, tendido en el andén, con la cabeza inclinada hacia el pavimento de la carretera, con impactos de bala en la cara y el brazo derecho.

De inmediato, los habitantes llamaron a la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc) para que arribara a la escena del crimen.

Los uniformados tuvieron que acordonar el lugar y solicitarles a los investigadores de la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) que adelantaran la inspección y el levantamiento del cadáver.

¿Cómo fue?

A las 4:20 de la tarde, dos hombres arribaron al lugar en una motocicleta venezolana marca Empire Arsen, color negro, se le acercaron a la víctima que estaba sentada en el andén, y uno de los agresores aprovechó para dispararle de manera indiscriminada.

El crimen ocurrió frente a la casa de la abuela materna de Daniel Rodríguez con la que él creció.

Una familiar, que arribó a la escena del homicidio, aseguró que, aunque no conocían de problemas o amenazas en contra de Daniel Augusto, de 31 años, este sí era consumidor de drogas. Sin embargo, dijo que la víctima también trabajaba en zapatería.

Extraoficialmente se conoció que hace una semana, los familiares de Rodríguez lo habían internado en el Hospital Mental Rudesindo Soto, con el fin de que se rehabilitara del desmedido consumo de drogas, pero finalmente se fugó del lugar.

Aunque algunos dolientes de la víctima aseguraron que su ser querido nunca había sido detenido ni había tenido líos judiciales, se conoció que, Rodríguez Mogollón estuvo indiciado por los delitos de hurto, tráfico de estupefacientes, estafa y violencia intrafamiliar desde 2010 hasta 2018, que le figura el último procedimiento.

Las autoridades avanzan en las pesquisas para esclarecer los móviles y los autores del crimen, del que no descartan la hipótesis que se haya desencadenado por la disputa del microtráfico en esta zona.

Cabe recordar que, al mediodía del sábado fue hallada la parte de una pierna humana que fue arrojada en un contenedor de basura en la calle 27 con avenida 1, del barrio San Rafael.

Este hecho alertó a los habitantes de la zona de las macabras acciones que se registran en la capital del departamento, por lo que le pidieron a la Policía que se refuercen los patrullajes de registro y control a lo largo y ancho de la ciudad.