Lo único que han conocido las autoridades sobre el secuestro de Fabián Solano Carvajal, de 21 años, ocurrido el pasado 31 de enero, es que sus captores pertenecen a una organización de delincuencia común y que exigen al menos 2 mil millones de pesos por su liberación.

El plagio ocurrió a las 10:20 de la noche del pasado domingo, en el sector Santa Rosa, en la vía que conduce hacia Tibú (Norte de Santander), cuando Solano se movilizaba junto a otro hombre en una volqueta de placas DHÑ-174 de color blanco, propiedad del papá de la víctima; allí fueron interceptados por un grupo de cinco hombres armados.

Los secuestradores atravesaron un carro sobre la vía para evitar que Fabián Solano y el ayudante de la volqueta, identificado como Dairon Prado Cuadros, continuaran la marcha; los dos hombres fueron intimidados con armas de fuego, mientras que el joven de 21 años fue obligado a bajarse del vehículo y a huir con ellos.

A Prado lo amarraron de pies y manos y lo dejaron tirado a un costado de la vía.

Minutos después del secuestro, Dairo se logró desamarrar y viajó en la volqueta hasta El Tarra, de donde es natural Solano, y allí dio aviso a los familiares y a las autoridades sobre lo sucedido.

Según se conoció, el papá de la víctima es propietario de un hotel en El Tarra.

Las autoridades adelantan las investigaciones del hecho.

*La Opinión