El sábado a las 4:45 de la tarde, Ronald Peña Chacón, un guerrillero de las Farc que durante más de 15 años militó en ese grupo armado y que hace dos había sido condenado por concierto para delinquir y otros delitos asociados a la rebelión, recobró su libertad en Cúcuta, convirtiéndose así en el primer amnistiado del país, en el marco de la Ley 1820 aprobada en diciembre de 2016 por el Congreso y reglamentada hace unos días.

Esta norma, contemplada en el acuerdo de paz suscrito en La Habana,  fue la primera que se aprobó después del proceso de refrendación, como parte de los beneficios para quienes se acogieran al proceso de desarme.

Según reportes del Ejército Nacional, Peña Chacón había sido capturado en Arauca, en 2013, en donde se desempeñaba como cabecilla de la red de apoyo al terrorismo de la compañía Uriel Londoño, del décimo frente de las Farc, y estaba encargado del cobro de extorsiones a comerciantes, ganaderos y contratistas en ese municipio, así como de coordinar acciones en contra de la fuerza pública y la sociedad civil.

En 2015 fue condenado a ocho años y medio de prisión por el Tribunal Superior de Arauca, pena que cumplía en la cárcel de Cúcuta.

Sin embargo, por cuenta del proceso de paz que alcanzaron el año pasado el Gobierno y las Farc, su boleta de libertad llegó antes de tiempo.

Según se conoció, el documento que libró de cargos al exguerrillero y que lo puso nuevamente en la calle, por orden de un juez de ejecución de penas, llegó el sábado en la mañana a la penitenciaría de la ciudad y tal y como lo establece la ley, tan solo unas horas después se hizo efectivo.

Ronald Peña Chacón fue recibido por personal de la Agencia Colombiana para la Reintegración, pero será el amnistiado el que decida si hace la solicitud de traslado a alguna de las zonas veredales o de qué manera buscará acogerse a los beneficios propios del proceso de reincorporación a la vida civil.

En vista de que Peña se encontraba en la cárcel y no tenía armas bajo su poder, el hombre tuvo que suscribir un acta en la que se compromete a no volver a utilizar este tipo de artefactos “para atacar al régimen constitucional y legal vigente”.

La Ley de Amnistía es clara en que dicha acta también contendrá “el compromiso de sometimiento y puesta a disposición de la Jurisdicción Especial para la Paz, la obligación de informar todo cambio de residencia a la Jurisdicción Especial para la Paz y no salir del país sin previa autorización de la Jurisdicción”.

Los beneficios de la amnistía

De acuerdo con la Ley de Amnistía, quien sea beneficiado con esta norma queda exento de las sanciones penales que le fueron impuestas, así como de las indemnizaciones derivadas de su conducta delictiva.

Además, si por los hechos o conductas objeto de la amnistía  se hubieran iniciado en su contra investigaciones disciplinarias o fiscales, o sanciones impuestas como resultado de las mismas, las amnistías o indultos las cobijarán igualmente.

Para tener en cuenta

En Cúcuta, actualmente, unos 180 guerrilleros de las Farc privados de la libertad se encuentran en calidad de presos políticos, por delitos asociados con la rebelión, por lo que podrían acogerse al proceso de amnistía.

Otros siete ya han sido indultados por orden del presidente Juan Manuel Santos y se encuentran bajo el acompañamiento temporal  de la Agencia Colombiana para la Reintegración, mientras se crea el Consejo Nacional de Reincorporación.

El Gobierno todavía no precisa por cuántos guerrilleros está compuesta la lista de indultados y amnistiados en el marco del proceso de paz.