Unos perros que escarbaron la tierra, dejaron al descubierto un olor nauseabundo que con los días se intensificó y  alertó a los vecinos de una trocha en el corregimiento de Juan Frío, justo detrás de una zona de captación de agua de la empresa Eicviro, en Villa del Rosario. 

El olor provenía de una fosa que los caninos hurgaron hasta arrancar y sacar trozos humanos de un cuerpo y el cráneo de un cadáver, los cuales esparcieron por los alrededores.

La información fue recepcionada por el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía, que dispuso de un equipo especial integrado por un antropólogo, una auxiliar y un fiscal, quienes se desplazaron desde Bogotá para practicar la exhumación.

La diligencia inició ayer a las 8:00 de la mañana luego de que el Ejército y el Grupo de Operaciones Especiales (Goes) de la Policía Metropolitana aseguraran el área e iniciaran, con pico y pala, la remoción de la tierra.

Hacia las 10:30 de la mañana, los funcionarios judiciales hallaron el cadáver enterrado a unos 60 centímetros de profundidad y a escasos metros del río Táchira, zona fronteriza con Venezuela.

Expertos del CTI señalaron que el cuerpo, al que le faltaba una tibia, un peroné y un zapato, llevaría unos 20 días enterrado; por el estado de descomposición se desconoce cómo murió esta persona, así como los rasgos particulares que puedan servir para su identificación. 

Información

Por ahora, se presume que se trata de un hombre, que  fue embolsado y trasladado a la morgue del Instituto de Medicina Legal en Cúcuta, donde esperan identificarlo por las huellas dactilares o la carta dental. Además, son esperados familiares de personas  desaparecidas  que puedan reconocerlo.

Al mismo tiempo, los funcionarios judiciales descartaron la ubicación de otra fosa en la zona donde se observaba removida la tierra.

La Fiscalía pidió a la ciudadanía que conozca sobre los hechos que rodearon este caso informar al celular 350-6013557, bajo absoluta reserva.