La angustia era evidente en el rostro de Ricardo Carrizales Mantilla, quien ayer en la mañana reclamaba ante Medicina Legal el cuerpo de su hijo para darle sepultura.

Diego Armando Carrizales Flórez murió en confusos hechos al enfrentarse presuntamente a la Policía con una pistola traumática. Por ello, el padre pide que se investigue a fondo a fin de determinar lo ocurrido realmente hacia las 3:20 de la madrugada del pasado miércoles en la calle 11 con avenida 20 del barrio Vallesther. 

El papá contó que su hijo trabajaba en construcción en un supermercado y la tarde del martes llegó a la casa a comer y después de bañarse y vestirse salió a visitar a la novia en Aguas Calientes,  hacia las 9:30 de la noche.  

Sin embargo, pese a que no regresó a dormir se despreocupó porque algunas veces se quedaba donde la novia. Sin embargo, el jueves en la mañana le dijeron que a Diego lo habían baleado. 

El padre aseguró  que iniciará un proceso tendiente a que se aclaren los hechos, manifestando que los policías hicieron uso desmedido de la fuerza “porque si él los enfrentó con un arma de juguete pudieron dispararle a una pierna y capturarlo y no matarlo en la forma como lo hicieron. Cuatro impactos recibió mi hijo, dos en el pecho y dos en la espalda”.

Ricardo Carrizales Mantilla dijo que su hijo era una persona honrada y trabajadora, que de eso pueden dar fe quienes lo conocieron en el barrio, y que se deberá determinar si era cierto que él portaba esa arma, quién se la dio y por qué estaba a esa hora en ese sector “cuando la versión de la novia era que tras visitarla a ella se había ido con unos amigos a jugar fútbol”.

Reiteró el llamado a las autoridades para que “se haga justicia y que se aclare bien el hecho, porque no era para que lo hubieran matado de manera tan injusta”.

El entierro de Diego Armando Carrizales Flórez se cumplió ayer en el Cementerio Central de Cúcuta. El exsoldado profesional deja un hijo de cuatro meses de nacido.

Los hechos

Cabe recordar que todo comenzó cuando la comunidad alertó a la Policía sobre la presencia de un sospechoso, por lo que se desplazó hasta el lugar indicado una patrulla conformada por el subintendente Marcelino Lemus Franco y un patrullero, quienes verificaron lo que estaría sucediendo.

Según lo dicho por las autoridades, el sospechoso al ver a los uniformados empezó a lanzarles piedras, por lo que intentaron atraparlo persiguiéndolo, pero Carrizales se tropezó y cayó al suelo. En ese instante, sacó la pistola traumática y les disparó a los agentes, impactando a Lemus Francos en una pierna. 

La reacción de los policías no se hizo esperar y respondieron disparando en al menos 13 oportunidades, impactando a  Diego Armando, quien herido fue llevado a la Unidad Básica de La Libertad, donde murió minutos después por la gravedad de las heridas.

El suboficial lesionado fue remitido a la clínica San José, donde los médicos dieron un parte positivo y solo tuvieron que sacar la bala de goma que le quedó incrustada en la pierna, según se conoció.