Hasta el momento, la única versión que se tiene es que a Erika Paola Villamizar, de 19 años, la mataron por robarle el celular. El crimen lo cometió presuntamente otra mujer, que iba como parrillera en una moto. 

El caso se registró a la entrada de una peluquería, en la calle 13 número 13-51del barrio Toledo Plata, donde la joven ayudaba y residía con su tía Rosa Elvira.

“El salón siempre estaba lleno, pero el sábado a las 7:00 de la noche no había clientes. Yo estaba hablando con otra sobrina cuando sentimos un tiro y brincamos del miedo. Luego, vimos a Erika entrando y se desmayó ante nosotros. Tenía sangre en la espalda”, recuerda Rosa Elvira sobre aquel angustioso momento.

La joven fue trasladada al Hospital Universitario Erasmo Meoz, adonde no alcanzó a llegar con vida. Al parecer, el mortal disparo le ingresó por el pecho.

“Yo corrí a ver quién la mató, pero no había nadie en la calle y el celular no apareció. Ella no tenía hijos, ni problemas con nadie. A esa hora, Erika regresaba de estudiar”, agregó la tía.

La parrillera

El coronel Yecid Mauricio Arango Sierra, comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta, indicó que la joven, natural de Arboledas, fue abordada por la pareja de motorizados y al poner resistencia al robo de su celular le habrían disparado.

“Luego de que la parrillera le disparó huyó con el motorizado del lugar. Le robaron un celular Samsung J5. La joven no registraba antecedentes y la familia manifestó que no tenía inconvenientes con nadie”, agregó el oficial.

Rosa Elvira contó que su sobrina se graduó de bachiller en Arboledas en 2015 y en enero del presente año le pidió permiso a su mamá para vivir con ella y estudiar en Cúcuta. El 20 de diciembre se graduaría de una carrera técnica.

“Ella vivía conmigo y cuidaba mi hija. Estudiaba sistemas y para cajera los jueves y los sábados. El celular que le robaron le costó $700.000”, añadió la tía, a la vez que pidió a las autoridades dar con el paradero de los responsables.