Las últimas dos semanas han sido ‘negras’ para Los Pelusos en Norte de Santander. Todo por cuenta de los tres golpes contundentes que les han dado Policía, Ejército, Fuerza Área Colombiana y Fiscalía, capturándoles sus tres principales cabecillas.

Esta nueva ‘mala hora’ de esta organización criminal se dio cinco años después de la muerte de uno de sus máximos líderes, Víctor Ramón Navarro Serrano, alias Megateo. Todo arrancó el pasado 8 de octubre, cuando un grupo de uniformados llegó hasta la casa donde se escondía Wilmer Guerrero Rincón, alias Japonés, en el barrio Ospina Pérez, en Cúcuta, y lo detuvo.

Ocho días después, en la vereda Montecristo, de Salazar de las Palmas, las autoridades aprehendieron a Crisanto Amaya Barbosa, conocido como Sato, señalado de ser el tercer cabecilla de este grupo armado ilegal en Norte de Santander.

Y ayer en la madrugada, le echaron mano a Richar Arley Díaz Garay, alias Cóndor, señalado de ser el comandante máximo de Los Pelusos. Las autoridades le llegaron hasta la vereda La Alejandra, que está entre Santiago y El Zulia.

“Estas tres capturas le significan un golpe certero para aniquilar a Los Pelusos en el departamento, pues así se quedan sin quien los dirija. A falta de alguien que organice esos delincuentes y que demuestre poder, ellos mismos comenzarán a pelear internamente, pues los de abajo siempre quieren tomar el mando y ahí se da la disputa”, señaló una fuente de inteligencia policial.

 En las fotos: Pácora (muerto), Cóndor y Japonés.

¿Por qué estaban dispersos?

Pero lo extraño para algunas autoridades es que estos tres cabecillas se hayan salido de la zona donde siempre permanecían y eran custodiados por sus hombres de confianza. Además, es confuso que las operaciones de las capturas fueran llevadas a cabo sin ningún problema y sin encontrar a los escoltas que siempre andaban con cada uno de los presuntos cabecillas.

Sin embargo, una fuente policial aseguró que estos presuntos criminales decidieron esconderse en los tres sitios donde los encontraron, porque estaban planeando una reunión con algunos narcotraficantes para hacer un intercambio de droga por armas.

Según un reporte de inteligencia, Los Pelusos están sufriendo una crisis por la falta de armas y es por eso que se dieron a la tarea de hacer contactos con grandes ‘narcos’ para conseguir arsenal de guerra.

“Por lo menos, ‘Japonés’, que era el encargado de todo el negocio del narcotráfico se vino a Cúcuta y se escondió en una vivienda donde estaría una mujer que lo tenía enamorado y precisamente, gracias a eso, fue que logramos ubicarlo y detenerlo”, señaló la fuente policial.

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La operación de captura contra Guerrero Rincón, que llamaron Piscis, fue planeada con comandos especiales de la Policía y la ejecutaron en la madrugada, pensando que así sorprenderían al anillo de seguridad de este hombre, pero cuando llegaron a la residencia, lo hallaron solo.

Lo mismo ocurrió con el operativo de aprehensión contra ‘Sato’, en zona rural de Salazar de la Palmas, que fue sorprendido solo.

Y en la de ayer, donde cayó ‘Cóndor’, la operación fue planeada con sigilo. Por eso, cuando la Policía tuvo la ubicación de este temible delincuente, que, según las autoridades, llevaba 17 años al servicio de esta organización criminal, organizó un grupo especializado de uniformados para que él no tuviera opción de escapar.

Según se conoció, los policías llegaron inicialmente a un punto ubicado a 800 metros de distancia de donde estaba escondido alias Cóndor, y luego iniciaron un recorrido de 41 kilómetros aproximadamente, que tardó un día, siguiendo las indicaciones del sistema de cartografía, bajo el estudio previo del terreno, hasta que fue atrapado.

Un alto mando de la Policía, que pidió no ser identificado, sostuvo que estos presuntos criminales se salen de las zonas donde corren peligro y buscan sitios que creen que jamás serán buscados por las autoridades ni por sus enemigos, “pero con lo que no se dan cuenta es que nosotros tenemos tecnología para hacer inteligencia e informantes que día tras día nos están ayudando más”.

 Richar Arley Díaz Garay, fue capturado en la vereda La Alejandra, entre Santiago y El Zulia/ Cortesía

Otra crisis interna

Cabe recordar que esta organización criminal también sufrió una crisis hace cinco años, más exactamente después del 2 de octubre de 2015, cuando en un operativo de la Policía murió ‘Megateo’. Luego de eso vinieron las capturas de Guillermo León Aguirre, alias David León, y de Reinaldo Peñaranda, ‘Pepe’.

Solo hasta después de casi un año, Los Pelusos comenzaron a recomponerse lentamente y Jader Navarro Barbosa, ‘Caracho’, asumió el mando, “aunque ya no era lo mismo, porque ‘Megateo’ imponía orden y una disciplina que nadie más pudo”, sostuvo una fuente policial.

Sin embargo, el poder de ‘Caracho’ duró poco, pues la diabetes provocó su muerte y fue ahí cuando Luis Antonio Quiceno Sanjuan, alias Pácora, asumió la comandancia por cerca de cuatro años, hasta que murió en un operativo militar y policial.

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Además, la guerra que Los Pelusos iniciaron contra el Eln, también ayudó a que se debilitaran y perdieran puntos en el Catatumbo que eran santuarios de ellos, obligándolos a venirse hacia Sardinata y Puerto Santander para hacer alianzas con Los Rastrojos.

‘Los arrinconamos’

Una fuente militar, que pidió no ser identificada, aseguró que al conocerse que este grupo armado ilegal se refugió en zonas cercanas a Cúcuta, enviaron alrededor de 800 soldados a cercarlos para atraparlos, “eso ayudó a que hoy se dieran esas acciones, pues los cabecillas se vieron obligados a salirse de esos sitios y buscar refugio en otros lugares, quedando desprotegidos de sus hombres”.

Agregó: “con estos golpes contundentes solo les queda una opción: entregarse a la justicia, dejar las armas y someterse. Es la mejor opción, porque cada vez que se captura a un cabecilla entran en una pelea interna y terminan matándose y jamás recobran ese poder que en algún momento tuvieron”.

El presidente Iván Duque resaltó la operación de la Policía a través de su cuenta de Twitter, y aseguró que ‘Cóndor’ presuntamente está vinculado en algunos homicidios de líderes sociales.

Richar Díaz es señalado por las autoridades de ser el sucesor de Luis Antonio Quiceno Sanjuán, Pácora, quien murió en una operación de la fuerza pública en Sardinata, en 2019.

Algunos delitos que le sindican son concierto para delinquir agravado, homicidio agravado, terrorismo y porte ilegal de armas.

Según las autoridades, Díaz está involucrado en los crímenes de los líderes sociales Luis Alfredo Contreras y Fernando Quintero Mena.

Asimismo, del homicidio de una menor de edad que había sido rescatada por el Ejército tras ser reclutada por la organización y cuando intentó retornar a la vida civil, fue asesinada.

‘Cóndor’ también ordenó la muerte de alias Grillo, producto de la disputa interna.

Díaz tenía bajo su mando al menos a 385 integrantes de Los Pelusos, ordenándoles cometer extorsiones, homicidios, desplazamientos, además del dominio del narcotráfico y la disputa armada con el Ejército de Liberación Nacional (Eln).