Algunos familiares de Elkin Yesid Ríos Melo, de 31 años, asesinado a balazos de manera indiscriminada en la tarde del viernes, en medio de su dolor, dejaron entrever que la muerte de su ser querido era un suceso que esperaban que ocurriera en cualquier momento, por su participación en cosas indebidas.

“Casi que esperábamos este golpe”, comentó un doliente en medio de los trámites para reclamar el cadáver en el Instituto de Medicina Legal.

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Tal vez, por este mismo presagio, Ríos estaba armado con un revólver en el momento de su asesinato, que aunque alcanzó a accionarlo contra los homicidas, no lo ayudó a  salvarse del mortal ataque.

Plan mortal

Para asesinar a Elkin Yesid Ríos fue necesario un grupo de seis homicidas, cuatro de ellos se movilizaban en un carro negro, mientras que una pareja iba en una motocicleta que arribó a la avenida 0 con calle 13 del barrio Comuneros, en la ciudadela Juan Atalaya, en cercanías al sector conocido como la Curva del Pescado.

La víctima estaba en un taller de mecánica mandando a reparar su carro, por lo que los pistoleros aprovecharon el escenario para cumplir su objetivo mortal.

“El señor estuvo desde la mañana mandando a arreglar el carro, pero cuando se iba a ir, ya en la tarde, tuvo que devolverse para ajustarle algo y ahí fue cuando pasó todo”, dijo un testigo del sangriento hecho.

Los ocupantes de la motocicleta se bajaron del vehículo y al ver que Ríos estaba parado frente al vehículo, de inmediato lo atacaron a bala.

Ríos Melo alcanzó a sacar su revólver y a disparar pero finalmente fue impactado en al menos nueve oportunidades en la cabeza, los brazos y las piernas.

La mujer y dos hombres que lo acompañaban, al percatarse del ataque a balazos, corrieron a esconderse en el baño del establecimiento.

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“Eso fue una balacera dura, pero yo hasta pensé que estaban tirando pólvora, por como sonaba eso, pero cuando me asomé vi al señor ya tirado en el piso muerto”, agregó un vecino de ese sector de Atalaya.

Antecedentes

Entre tanto, el coronel Francisco Gélvez, subcomandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta, aseguró que Elkin Yesid Ríos Melo tenía una condena por los delitos de secuestro y concierto para delinquir. “Acababa de salir de la cárcel”, dijo el oficial.

En la escena del crimen, miembros de la Brigada Interinstitucional contra Homicidios (Brinho), practicaron la inspección y el posterior levantamiento del cadáver para recopilar los elementos probatorios que permitan esclarecer los hechos.

El coronel Gélvez aseguró que los miembros de inteligencia avanzan en las verificaciones para seguirle el rastro al grupo de seis homicidas y poder tramitar las órdenes de captura con la Fiscalía.