La única pista que tienen las autoridades del crimen de Emiro Antonio Arévalo Quintero, registrado en zona rural de Ocaña, es que la noche del domingo estuvo tomando licor con otras personas en el sitio conocido como La Vuelta del Primo, en Junín.

Arévalo era reconocido en la plaza de mercado de Ocaña, donde trabajaba como vendedor.

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Se estableció que recibió una puñalada en el cuello que le quitó la vida de manera inmediata.

El comandante encargado de la Policía en Ocaña, teniente Carlos Acevedo, indicó que el cadáver fue hallado a cinco kilómetros del casco urbano, y de acuerdo con las versiones que se han conocido hasta el momento, Arévalo estaba en un  establecimiento comercial tomando licor acompañado de otras personas.

El reporte 

En la mañana del lunes, algunos campesinos reportaron el hallazgo del cadáver, por lo que de inmediato uniformados de la Seccional de Investigación Criminal (Sijín) de la Policía en Norte de Santander, practicaron la inspección y el levantamiento, para luego trasladarlo a las instalaciones del Instituto de Medicina Legal.

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Por ahora, los investigadores judiciales adelantan las pesquisas para esclarecer el crimen e identificar a los autores del hecho.

Cualquier información se puede entregar a la línea 123 o al correo institucional para aportar a las investigaciones de la Policía.