Más de 37 horas duró la familia de Jesús Cáceres Ortiz, de 21 años, buscando a su ser querido en el corregimiento Astilleros de El Zulia, de donde desapareció el pasado sábado a las 8:30 de la noche.

A las 10:00 de la mañana de este lunes, los trabajadores de un cultivo de arroz hallaron el cadáver de Cáceres en estado de descomposición.

El joven, miembro de la comunidad Lgtbi, murió tras recibir tres disparos; dos lo impactaron en una pierna y el otro en la cara.

Jesús vivía en el barrio Escalabrini, de Cúcuta, pero desde hace una semana había llegado de visita a la casa de un primo en este corregimiento.

Según se conoció, la víctima salió a cumplirle una cita a un amigo y desde ese momento su familia no supo más de su paradero.

En medio de lágrimas, los parientes lamentaron el asesinato de Jesús y manifestaron desconocer si existía algún problema que haya podido desencadenar el crimen.

La inspectora de Policía de El Zulia practicó el levantamiento del cadáver, que fue trasladado al Instituto de Medicina Legal, en Cúcuta.

Allí, miembros del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía adelantaron la inspección técnica al cuerpo de Cáceres Ortiz.

La Policía Metropolitana de Cúcuta adelanta las investigaciones sobre el crimen para tratar de esclarecerlo.

Los familiares, presos del pánico y la angustia, no salían de la impresión al ver el cadáver de Jesús, tirado en medio de los cultivos de arroz.

Los parientes pidieron a las autoridades que se esclarezca el crimen y se capture a los responsables del hecho.

Jesús tenía previsto devolverse el domingo a Cúcuta para continuar con sus estudios en el Servicio Nacional de Aprendizaje (Sena).

Los habitantes del sector aseguraron que desde hace tiempo no se registraba un hecho violento en la zona.

La Opinión