A Edith Barbosa Becerra, conocida como Camila, y señalada por sus familiares y amigos de ser una lideresa comunal en el corregimiento La Gabarra, en Tibú, la habrían citado al sector conocido como Matecoco, para asesinarla la mañana del lunes.

La trágica noticia provocó revuelo en una parte de esa población del Catatumbo, pues algunos habitantes la querían, mientras otros le tenían miedo, porque, según ellos, acostumbraba amenazar a la gente para conseguir lo que quería.

Por eso, cuando las autoridades se enteraron de su asesinato, ya sabían quién era ella, pues a Barbosa Becerra la habían capturado en febrero de 2019, tras ser señalada de pertenecer al Ejército de Liberación Nacional (Eln), y por eso fue que siempre estuvo custodiada por siete uniformados entre policías y militares, por el alto valor que presuntamente tenía para la fuerza pública.

La mujer fue detenida en La Gabarra por los delitos de concierto para delinquir y rebelión.

El coronel George Quintero, en ese entonces, comandante de la Policía de Norte de Santander, aseguró que ella fue señalada de instar a los habitantes de esa población a participar en el paro armado que dejó un policía herido, una motocicleta quemada y fueron robados una pistola y dos radios de comunicación.

Además, de esto, según las autoridades, ‘Camila’ era cabecilla de finanzas del frente Luis Enrique León Guerra, del Eln, y, coordinaba la logística de esta organización.

El coronel Quintero informó en ese entonces que le seguían los pasos a Barbosa por estos y otros hechos delictivos que afectaron a la fuerza pública.

Al parecer, “la cabecilla del Eln estaba a cargo del control de las rutas del narcotráfico, del cobro de extorsiones a comerciantes y de hacer labores de inteligencia a soldados y policías en la zona”.

Una fuente judicial aseguró que, “ella era la pareja de un guerrillero del Eln conocido como ‘Camilo’, cuando fue capturada. Sin embargo, alegó que era madre cabeza de familia y por eso le dieron el beneficio de casa por cárcel”.

Según se conoció, ‘Camila’ estaba incumpliendo la medida de aseguramiento, y desde hacía tres meses rompió su relación con su pareja.
 
Sin embargo, las autoridades conocieron que presuntamente, en la actualidad inició otra relación, también con un miembro del Eln, con el que, al parecer, protagonizaba desplazamientos forzados en una invasión de La Gabarra.

“Entre los dos hicieron desplazamientos en una invasión, llegaron y quemaron cambuches y estaban desplazando a la gente y extorsionando para quedarse con esos lotes. Ya hasta había nombrado Villa Camila a la invasión”, agregó la fuente.

El 5 de octubre, algunos afectados se quejaron ante la Defensoría del Pueblo y la Personería de Tibú sobre estos hechos, por lo que estos informes fueron remitidos a la Policía.

Barbosa vivió durante los últimos 20 años en La Gabarra. Las autoridades avanzan en las pesquisas del hecho.