2.100 cuerpos, 1.600 en Norte de Santander y 500 en Nariño, inician proceso de identificación a manos del Instituto de Medicina Legal y la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas (UBPD), por cerca de dos o tres meses.

Para ello, desde este lunes y hasta el viernes, se llevará a cabo una prueba piloto para el desarrollo de la identificación de los cuerpos, a los cuales entre 1960 y 2016, el Instituto de Medicina Legal realizó necropsia médico legal sin lograr la identificación.

“Esto es una manera de aportarle a la paz del país, de darle respuesta a las familias de aquellas víctimas de desaparecidos. Es ponerse en los zapatos de ellos”, expresó la directora de Medicina Legal, Claudia Adriana del Pilar García. 

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La prueba piloto, según la directora de Medicina Legal, consiste en realizar un diagnóstico del estado del proceso de identificación de cada uno de los cuerpos, identificando las acciones que podrían emprenderse para completar el proceso.

En ese sentido, a través de tres equipos (dos en Norte de Santander y uno en Nariño) se recolectará y analizará la información de los expedientes de necropsia, bases de datos y otras fuentes de información que permitirán realizar planes de acción para impulsar la identificación. Los equipos están conformados por antropólogos, odontólogos, genetistas y técnicos en criminalística.

“El hallazgo de las personas dadas por desaparecidas  ocurre cuando se logra establecer el nombre de las personas o cuerpos recuperados y es en ese momento en que puede devolvérseles a sus seres queridos”, destacó la directora de la UBPD, Luz Marina Monzón.

El proceso de identificación de los cuerpos que se recuperan y se entregan al Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, según resaltó Monzón, puede tardar meses e incluso años debido a distintas razones.

Entre 1960 y 2016 el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses no ha podido concluir el proceso de identificación de cerca de 25.000 cuerpos a los que se han realizado necropsias médico-legales y, de acuerdo con el Observatorio de Memoria y Conflicto del Centro Nacional de Memoria Histórica, en Norte de Santander hay registros de 3.067 personas desaparecidas y en Nariño de 2.320.