Los descarnados relatos de dos importantes testigos de la muerte de José Luis Ramírez Obregón comprometieron tajantemente ayer, en el arranque del juicio, al investigado funcionario del antiguo DAS Alexander Saravia Garzón.

Uno de los testimonios dejó al descubierto que el 8 de diciembre de 2011, cuando se conmemoraba el día de las velitas, el exinvestigador del DAS sacó un arma y amenazó de muerte a Ramírez Obregón. En cuestión de segundos, el estanco de la avenida 1 con calle 29 del barrio San Rafael se tiñó de sangre.

Eran las 4 de la madrugada. “José Luis  nos dijo que nos fuéramos para la casa que (Alexander) estaba muy pesado con el arma. Cuando (el hoy fallecido) se fue a despedir (Alexander) le agarró la mano, sacó el arma de la cintura y se la puso (a José Luis) en el abdomen. Le dijo ‘perro hp’ se tiene que morir hoy. Después le disparó en el abdomen”, recordó uno de los declarantes.

El joven cayó al piso. Como pudo se levantó para ponerse de rodillas. “Le dijo (a Alexander) que por favor no lo dejara morir”, añadió el testigo en audiencia pública.

Continuando con su relato, precisó que el agresor le apuntó nuevamente al hombre herido -esta vez a la cabeza- y le reiteró que se tiene que morir.

“Le dijimos (a Alexander) que por favor nos dejara montarlo a un taxi, que no lo dejara morir, que él no se podía morir”, añadió el testigo de la Fiscalía ante el juez Sexto Penal del Circuito de Cúcuta con funciones de Conocimiento.

La respuesta del pistolero habría sido negativa. De hecho, quien estaba presente, aseguró en el Palacio de Justicia que le dio cinco minutos para que corriera porque, de lo contrario, también lo iba a matar.

“Le insistí que me dejara llevarlo y él me puso la pistola en el pecho y empezó a engatillarla. Me dijo que me fuera que si no me mataba también. Le dije que me quedaba y que si quería me matara”, afirmó el mencionado declarante.

En ese mismo instante apareció una patrulla de la Policía. “Salí a atravesármele”, mientras Alexander “salió corriendo a esconderse al DAS”, agregó.

Los policías, según se conoció durante los dos primeros días del juicio, fueron recibidos con disparos, a los cuales ellos respondieron. Cuando la balacera se detuvo, José Luis fue trasladado al hospital. Finalmente murió.

El sospechoso fue capturado a las 6 de la mañana en el DAS y se incautó, además, su pistola 9 milímetros, la cual tenía el respectivo salvoconducto.

¿Qué sucedió antes del crimen?

El testimonio de una segunda persona puso sobre la meza las piezas faltantes en el  rompecabezas del crimen: lo que sucedió una hora antes.

“Llegué a las 2 o 3 de la madrugada (al establecimiento público). Departí unas cervezas con unos amigos. (Alexander) estaba ahí muy bullicioso, muy alterado, muy cansón. Los muchachos estaban molestos por eso”, dijo el declarante.

Esa situación, suscitó que intentara encarar al exinvestigador. “Me le presenté. Estiré mi mano y le dije que mucho gusto. El me dio la mano. Me dijo ‘Benito-cámelas’. Levantó la pierna, me dio una patada suave, y con la otra mano se levantó su franela y me mostró la pistola”, manifestó.

Tras observar el arma, prendió su motocicleta para avisarle a los policías del barrio que un hombre armado estaba intimidando a las personas.

En el CAI del sector había un solo uniformado y la respuesta fue clara: debía esperar a que llegara la patrulla que estaba recorriendo el barrio Santo Domingo.

“Me devolví (al estanco). Cuando llegué el hijo de un amigo (a quien le dicen Gringo) estaba alegando con Alexander. Le insistí a Gringo para que se subiera a la moto. Entonces se volteó e hizo caso. Regresé al CAI (…) y cuando estaba frente a la patrulla llegó una persona gritando que ‘lo mató, lo mató’”, agregó el testigo.

Dictámenes forenses

Especialistas forenses del Instituto de Medicina Legal revelaron, también en audiencia pública, los resultados de los exámenes practicados a Alexander Saravia Garzón durante la investigación. Estos son algunos apartes:

- Presentó embriaguez clínica aguda positiva grado 1.

- La gente que tiene problemas mentales en su infancia, como los tiene Alexander desde que nació, tiene desviación de la personalidad.

- Es una persona aislada, que no tiende a socializar ni a establecer vínculos afectivos con nadie.

-Tiene rasgos de desconfianza. Cree que la gente le quiere hacer daño. Cree que la gente lo quiere lastimar sin ser real.

- No se adapta a los rasgos de la sociedad donde vive. Tiende a ser tramposo, tiende a ser ladrón, tiende a ser violador y no adaptado a las normas de su grupo social.

- Posee trastornos mentales y comportamentales por consumo de etanol (bebidas alcohólicas) y tabaco.

- Cuando se efectuaron los exámenes estaba bajo los efectos tóxicos del etanol y el tabaco. Sin embargo, podía autodeterminarse y elegir su conducta bajo esa condición.

- Su conducta no fue errática. Durante antes y después de los hechos se comportó de forma lógica a pesar de que estaba bajo los efectos del etanol y el tabaco. Se condujo de forma lógica.