En medio de un ataque indiscriminado a balazos en el barrio Niza, resultó muerto Fabio Antonio Rodríguez Miranda, 'El Loro', y un taxista quedó herido de tres disparos.

La esposa de Fabio Antonio Rodríguez Miranda, de 39 años, se quedó esperando a su pareja la noche del viernes, para ir a comprar los regalos de Navidad de sus dos hijos, tal y como él se lo había prometido minutos antes de que lo asesinaran.

“Mi amor, ya vendí la moto, ya voy para la casa para ir a comprar los regalos”. Esas fueron las últimas palabras que Rodríguez le dijo a su compañera, antes de abordar un taxi en el barrio Niza.

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Luego de andar dos cuadras, dos hombres en una motocicleta venezolana marca Keeway Tx 200, interceptaron el taxi en la calle 19AN con avenida 16BE y atacaron a disparos a los ocupantes.

Rodríguez Miranda, quien viajaba como pasajero en la parte delantera, murió de manera inmediata al ser impactado en al menos ocho oportunidades, en la cabeza, el brazo derecho y el pecho.

Entre tanto, Isael Antonio Iscalá Dueñas, de 49 años, conductor del vehículo de servicio público, de marca Chevrolet Spark, de placas THZ-227, recibió tres balazos, razón por la cual tuvo que ser trasladado a la clínica Medical Duarte.

Luego de cometer el crimen, los pistoleros huyeron con rumbo hacia la Avenida del Río.

Las autoridades analizan un video de una cámara de seguridad que está ubicada a pocos metros de la escena del crimen.

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Registros judiciales

Según el reporte de la Policía Metropolitana de Cúcuta, Rodríguez Miranda tenía una orden de captura por el delito de hurto calificado y agravado de mayo de 2011.

Asimismo, estuvo indiciado por porte ilegal de armas en 2009 y 2010.

Además, según se conoció a través de fuentes judiciales, al parecer Fabio Antonio Rodríguez Miranda sería el presunto segundo cabecilla urbano de Los Pelusos, en Cúcuta.

No obstante, sus familiares  aseguraron que se dedicaba a la compra y venta de motocicletas y carros  en el Palacio Nacional, desde hacía un año.

Minutos antes del homicidio, Rodríguez vendió una motocicleta marca Kawasaki KLR, valorada en al menos $3 millones. Ese dinero no se le encontró a Rodríguez Miranda.

Por ahora, las autoridades adelantan las investigaciones para esclarecer los móviles del crimen.