El pasado de José del Carmen Rolón Ovalles será pieza clave para que las autoridades adelanten las pesquisas que permitan esclarecer su homicidio, ocurrido la noche del jueves, en la calle 2 con avenida 1 del barrio Siete de Agosto, en límites con Niña Ceci, en la ciudadela Juan Atalaya.

Las autoridades empezaron a conocer los líos judiciales del hombre en agosto de 2012, cuando fue detenido junto con cinco personas más, señalados de los delitos financiación del terrorismo y de la delincuencia organizada y porte ilegal de armas.

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En el momento de la captura, el entonces coronel Álvaro Pico Malaver, comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta, señaló que los cinco hombres y la mujer detenidos aseguraban ser los nuevos urabeños, “pero en realidad eran delincuentes que copaban los espacios dejados por otros líderes de organizaciones criminales presos”.

Condena

En febrero de 2016, en medio de una audiencia condenatoria, la Fiscalía no logró demostrar ante un juzgado especializado el delito de financiación del terrorismo, pero sí el porte ilegal de las armas en que incurrieron los procesados.

Las autoridades les incautaron una pistola Pietro Beretta, con un proveedor y tres cartuchos; un revólver marca Llama Martial, calibre 38, con seis cartuchos y otro marca Smith&Wesson, calibre 38, con seis cartuchos.

Expertos en balística demostraron que las armas incautadas eran aptas para ser disparadas y ninguno de los implicados tenía permiso para porte o tenencia.

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En dicha audiencia, la Fiscalía detalló que las detenciones se cumplieron luego de recibir los datos suministrados por un informante sobre el accionar de personas al mando del Mico, que presuntamente se encargaban de cometer homcidios, cobrarles vacunas a los expendios de estupefacientes, extorsionar y traficar armas.

Los detenidos fueron condenados a nueve años de prisión.

El crimen

A las 8:15 de la noche del jueves, dos hombres que se movilizaban a pie, se le acercaron de manera sigilosa a Rolón y le dispararon en dos oportunidades en la cabeza, quitándole la vida de manera inmediata.

La víctima estaba frente a su casa, donde vivió durante el último año, arreglando el contador.

Se conoció que Rolón Ovalles salía desde muy temprano de la vivienda a trabajar en el centro de Cúcuta y siempre arribaba en las noches.

Por ahora, la Policía Metropolitana de Cúcuta adelanta las investigaciones para esclarecer los móviles del crimen e identificar a los autores de este hecho de sangre que alteró la tranquilidad del sector.