Bocarriba,con dos balazos en la cabeza, portando un tapabocas negro, vestido de bluyín corto, camisa negra y tenis. Así fue encontrado el cuerpo de Enrique Breidy Calderón Mendoza, en el barrio Las Cumbres de la ciudadela Juan Atalaya, la tarde del pasado domingo. 

El hombre quedó entre un hoyo, en la parte alta de dicho barrio, en inmediaciones del sector La Laguna, cerca del cementerio Gólgota.

Hacia las 5:30 de la tarde, la Policía Metropolitana de Cúcuta fue alertada del hecho y de inmediato arribaron los investigadores de la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) para inspeccionar la escena y proceder al levantamiento.

La Opinión conoció que varios vecinos del lugar aseguraron no oír detonaciones de arma de fuego y fue un transeúnte que halló el cuerpo. Junto al brazo izquierdo de la víctima estaba una gorra roja.

“Nadie lo reconoció. Yo lo alcancé a mirar antes de que la Policía llegara y no era de acá. Era joven y bien vestido. Como madre uno espera que no sea alguien de la familia” dijo una vecina.

Calderón, de 27 años, tiene varios tatuajes. Uno en el antebrazo derecho con el nombre Hilary y en el izquierdo, un tigre junto al nombre Paola (acompañado de una rosa). Uno más, en el antebrazo izquierdo, con la palabra familia. 

Por ahora, las autoridades avanzan en las pesquisas para determinar los responsables de este hecho violento.

Tres muertes violentas 

Entre tanto, Calderón Mendoza, se convirtió en la víctima mortal número tres, en lo que va corrido de julio.

El primer caso ocurrió el miércoles 1 de julio, el barrio Fátima de Villa del Rosario, cuando fue asesinado Germán Asdrúbal Gélvez Becerra, de 19 años. 

Un segundo hecho, la noche del sábado 4, cuando fue asesinado de un balazo de escopeta José Isidro Merchán Ortega, de 31 años, en el barrio La Ínsula.