Un hombre fue asesinado la madrugada del pasado sábado y su cuerpo lo abandonaron en el sector El Infierno, entre Puerto Santander y Boca de Grita (Venezuela).

Familiares de la víctima fueron dos veces hasta aquel apartado lugar para buscar la forma de recoger el cadáver, que supuestamente quedó en territorio venezolano. Según se conoció, las autoridades de ese país no permitieron sacarlo, pero tampoco se hicieron cargo de recogerlo.

Ayer, los parientes y un empleado de la funeraria Nuestra Señora del Carmen trataban de recuperar el cuerpo para trasladarlo a Medicina Legal en Cúcuta y así las unidades de la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) puedan adelantar la inspección técnica.

Sobre el hecho, es muy poco lo que se sabe. Al parecer, al hombre lo asesinaron al otro lado de la frontera y los homicidas abandonaron el cadáver en ese punto.

El coronel José Luis Palomino, comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta, señaló a La Opinión que estaban a la espera del cadáver y poder  hablar con los familiares para saber quién es el occiso.

“Lo único que se ha podido saber es que en territorio venezolano, muy cerca de la frontera con Colombia, apareció ese cuerpo. Además, los parientes estaban gestionando para pasarlo y entregárselo a una funeraria que lo traiga a Medicina Legal”, sostuvo una fuente judicial a La Opinión.

Pero, hasta el cierre de esta edición, el cadáver no había sido trasladado hasta la capital de Norte de Santander y se desconoce su identidad.

Cabe recordar que en el sector El Infierno se libra una lucha armada entre Los Rastrojos y el Eln, por el control de territorio para el cobro de extorsiones y el manejo del contrabando y el narcotráfico.