Las personas que pasaban cerca de un reconocido centro comercial en la calle 11 entre avenidas cero y primera del centro de Cúcuta, quedaron en medio de una balacera originada en medio del atraco a un escolta que caminaba por allí.

El hecho ocurrió el viernes 24 de julio hacia las 12:25 de la tarde, cuando José Gregorio Gómez Mendoza fue abordado por tres hombres que se movilizaban en dos motocicletas con la intención de robarlo.

José Gregorio, quien trabaja como guardaespaldas, llevaba un revólver marca Llama calibre 38, con permiso para porte, por lo que aunque alcanzó a reaccionar, terminó siendo víctima de los atracadores.

Los delincuentes le robaron el arma de su propiedad, protagonizando en el acto un intercambio de disparos que alteró la tranquilidad en la zona céntrica, dejando a un hombre herido ajeno a lo que allí estaba ocurriendo. 

Según se conoció, el taxista Carlos Humberto Lizcano Contreras recibió un impacto de bala en la ingle, quien por sus propios medios acudió a la clínica San José, donde recibió atención facultativa. 

Quedaron grabados

El hecho, propio de una película de acción, quedó grabado en las cámaras de seguridad de la céntrica zona cucuteña, por lo que los investigadores de la Seccional de Investigación Criminal (Sijín) analizan las imágenes para identificar a los autores del atraco y darles captura. 

Uno de los delincuentes vestía bluyín, buzo gris y casco de protección negro, quien iba a bordo de una motocicleta venezolana, también negra.

El presunto atracador quedó grabado cuando huye de la escena del hecho mientras conduce la moto con la mano derecha y con la izquierda apunta con un revólver a la víctima.

Minutos después de que los asaltantes huyeran, uniformados de la Policía Metropolitana de Cúcuta arribaron al lugar para adelantar las pesquisas.

En el sitio quedó impactado un vehículo particular en el panorámico, evidencia del intenso tiroteo y del peligro al que estuvieron expuestos los comerciantes y los transeúntes.

Por ahora avanzan las investigaciones para ubicar a los atracadores quienes con arma en mano y abriéndose paso a bala, impusieron la ley y el temor en este concurrido sector de la ciudad.