Jhon Jairo Restrepo Manco, señalado por la Policía de ser el culpable del desplazamiento de 200 personas de los corregimientos de Palmarito y Guaramito en Norte de Santander, fue condenado a 11 años y 24 días de prisión.

Restrepo Manco, conocido como ‘Tony’, aceptó los cargos por concierto para delinquir agravado (con fines de homicidio y tráfico de estupefacientes) y fabricación, tráfico y porte ilegal de armas y municiones.

‘Tony’, de 28 años, natural del municipio de Apartadó (Antioquia) y desmovilizado del Bloque Guaviare de las Autodefensas, fue capturado el 5 de julio de 2014 por miembros de la Dijín en el condominio Balcones de Chipre, en Manizales, adonde supuestamente llegó para reunirse con miembros de Los Rastrojos, banda a la que pertenecía desde el 2007.

Para entonces, el general (r) Rodolfo Palomino, director general de la Policía, informó que dicho encuentro, al parecer, buscaba que la organización avalara una alianza con narcotraficantes del Norte del Valle, con la que se podrían obtener nuevas rutas para el movimiento de drogas.

Las autoridades informaron que este hombre estaba vinculado en al menos 16 homicidios.

“Salió de una zona rural cercana a Venezuela, donde permanecía escondido, y viajó a Manizales para, incluso, conmemorar un aniversario con su compañera sentimental”, añadió entonces el general Palomino.

Restrepo Manco asumió el liderazgo de Los Rastrojos a mediados de 2013, tras la captura en Bucaramanga de Jesús Antonio Murillo Moreno, alias Guiovany, quien para esa época fungía como el principal cabecilla de la banda.

Desde entonces, encabezó un enfrentamiento contra los miembros de Los Urabeños, lo que desencadenó varias muertes y el desplazamiento de numerosas de familias en distintas poblaciones.

“Hizo parte de Los Rastrojos en calidad de comandante. En Puerto Santander y sectores aledaños ordenaba homicidios y nombraba al personal para las zonas urbanas y rurales para supervisar los laboratorios de estupefacientes. Para el cumplimiento de sus funciones portaba una pistola Pietro Beretta”, relató la Fiscalía.

Preacuerdo

Tras su captura, ‘Tony’ fue presentado ante el Juzgado Primero Penal Municipal con función de control de garantías de Cúcuta, que legalizó su captura y le impuso medida de aseguramiento en la cárcel de la ciudad, mientras avanzaba el proceso en su contra.

El 10 de junio de 2015, ‘Tony’ llegó a un preacuerdo con la Fiscalía, con el propósito de terminar anticipadamente el proceso, que consistió en aceptar su responsabilidad frente a estos dos delitos a cambio de recibir un descuento del 30 por ciento en la pena.

Dicho preacuerdo fue  aprobado esta semana por un juzgado especializado de Cúcuta que lo condenó además a pagar una multa de 1.890 salarios mínimos legales mensuales vigentes a favor del Estado.

“El acusado fue procesado después de una ardua investigación, de la cual resultó que hacía parte de una organización criminal dedicada a ejecutar homicidios y traficar con estupefacientes utilizando armas de defensa personal como lo demuestran los elementos de prueba y lo admitió al aceptar su responsabilidad, tal y como consta en el preacuerdo”, señaló el Juzgado especializado en su decisión.

Los homicidios en que presuntamente estuvo vinculado ‘Tony’ no fueron materia de debate probatorio en este juicio.

La Opinión