Dos atracadores de teléfonos celulares de alta gama, un hombre buscado por tráfico de drogas y otro que portaba un revólver ilegal, fueron capturados por uniformados de la Policía Metropolitana de Cúcuta, en hechos aislados, en los barrios Aniversario Dos, Torcoroma, Popular y Pueblo Nuevo. Tres de ellos, eran buscados con orden de captura expedida por diferentes juzgados de Cúcuta.

Guillermo Rincón Galán, de 33 años, fue capturado en la calle 11 del barrio Torcoroma. El hombre era buscado por el delito de hurto agravado, a través de una orden de captura expedida por el Juzgado de Ejecución de Penas y Medidas de Seguridad. 

Asimismo, uniformados de la Seccional de Tránsito y Transporte, en desarrollo de planes de intervención, capturaron a Pablo César Rangel Sáenz, de 36, buscado por hurto calificado, con orden de captura solicitada por el Juzgado Primero de Penas de Cúcuta.

Según la Policía, Rincón y Rangel se dedicaban presuntamente a robar celulares de alta gama a través de las modalidades de raponazo y atraco con arma blanca. 

Entre sus principales víctimas estaban presuntamente mujeres, estudiantes y ancianos.

Entre tanto, policías del Comando de Atención Inmediata (CAI) Escobal, en medio de labores de patrullajes de registro y control de personas, detuvieron a Orlando Meneses Carrascal, en la calle 8 con avenida 17, del barrio Aniversario Dos.

Cuando los uniformados interceptaron e identificaron a Meneses, de 36 años, quien se movilizaba a pie por el sector, se percataron que tenía una orden de captura solicitada por el Juzgado Primero Penal Municipal del Circuito Especializado con función de conocimiento de Cúcuta, por el delito de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes.

Alertó a los vecinos

Jhorman Andrey Barbosa Benavides, de 28 años, despertó sospechas en los vecinos de la calle 0 con avenida 10 del barrio Pueblo Nuevo, luego de merodear en el sector.

De inmediato, los habitantes informaron a los policías del grupo de Fuerza Disponible que patrullaban el lugar, para que lo requisaran.

Cuando Barbosa se percató de la presencia de los uniformados arrojó al piso un revólver marca Smith & Wesson, con dos cartuchos, sin permiso para porte, y se escondió en un establecimiento comercial del lugar.

Sin embargo, los uniformados lo capturaron en flagrancia por el delito de porte ilegal de armas.

Los cuatro detenidos fueron enviados a la cárcel, donde deberán permanecer mientras avanzan los procesos en su contra.