Frente a las instalaciones del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) permanecieron por más de ocho horas, las 24 reclusas que fueron trasladadas desde Santander a la sede del Inpec en Cúcuta.

La razón, el sindicato no permitía su ingreso y solo después de una larga reunión admitieron a las presas.

Según se conoció, la Policía de ese departamento arribó con las detenidas desde las 10:00 de la mañana, pero no pudieron ingresar inmediatamente, por el impedimento del sindicato del centro penitenciario.

Aunque las autoridades tenían en su poder la resolución que ordena el traslado de las mujeres involucradas en homicidio, rebelión y hurto a Cúcuta, no pudieron ingresar inmediatamente.

“El sindicato argumentó que en este momento hay hacinamiento en la cárcel y por eso no permitían el ingreso de las detenidas”, dijo una fuente judicial cercana al caso.

En medio de la espera, algunas de las detenidas optaron por dormir frente a las instalaciones del Inpec.