Tal como lo anunció en el sentido de fallo, el Juzgado Primero Penal del Circuito de Cúcuta condenó a 36 años de cárcel a tres hombres por el asesinato de Jennifer Katerine Rodríguez Fajardo, de 20 años. Un cuarto detenido aceptó los cargos.

Se trata de Pedro Gustavo Ladino Álvarez, Andrés Cuenca Flor y Daniel Alejandro Sandoval Gómez, quienes fueron hallados culpables como coautores del delito de homicidio agravado y fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones, también agravado.

Los hechos se registraron el 10 de mayo de 2013, hacia las 3:25 de la mañana, en el sitio conocido como la redoma de Cenabastos, cuando fue reportado el hallazgo de una mujer herida con arma de fuego.

Al verificar la situación, la Policía alcanzó a hallar con vida a la víctima, quien les manifestó haber estado minutos antes con cuatro sujetos que huían en un taxi.

Esa información fue suficiente para que, a través de un plan ‘candado’, fuera interceptado el carro Daewoo Cielo, de placa URK-879, con los cuatro ocupantes. Las capturas, en flagrancia, se cumplieron en el puente  La Gazapa.

Los cuatro hombres, “al observar la presencia de los agentes policiales, arrojaron por la ventana del taxi un revólver (…) Registrado el carro, fue hallado un cartucho calibre 38, percutido”, señaló la Fiscalía.

Según se conoció, la joven se encontraba en el bar de un hotel del barrio La Merced y abordó el taxi.

“Se sabe que ella salió de manera voluntaria con estas cuatro personas”, dijo para entonces el comandante de la Policía Metropolitana.

En el transcurso del juicio se supo que los cuatro hombres iban en el taxi, conducido por Daniel Alejandro y la mujer fue ubicada en el puesto de atrás, entre Ladino Álvarez y Zamir Cetina. Cuenca Flor iba al lado del chofer.

Escuchadas las partes, el Juzgado concluyó, entre otras consideraciones, que la mujer opuso resistencia antes de ser asesinada, como lo demostraban 22 esferas pequeñas halladas en el vehículo y que hacían parte de una pulsera que tenía la víctima, que se rompió en el momento en que fue obligada a bajarse para dispararle fuera del taxi.

También, que fue hallada en el puesto trasero una mochila, color marrón, que pertenecía a Jennifer Katerine y en el cojín delantero, donde iba Cuenca Flor, había un cartucho del arma con la cual se causó la muerte a la víctima.

“La presencia de los tres procesados en el taxi los compromete gravemente en la participación de la acción criminal, porque son mínimas las posibilidades de atribuir esas circunstancias (…) a la simple casualidad como lo quieren hacer creer los enjuiciados, por intermedio de sus defensores”, se escuchó durante la audiencia.

Sumado a ello, la prueba de residuo de disparo resultó positiva para Ladino Álvarez “indicando esto que muy posiblemente fue quien disparó en contra de la mujer”.

Así las cosas, el Juzgado desvirtuó los argumentos de los defensores y señaló que los procesados actuaron como coautores de la muerte violenta de la joven.

Los condenados no recibieron el beneficio de casa por cárcel, ni la suspensión condicional de la ejecución de la pena. Fueron trasladados a la cárcel de Cúcuta, donde deberán purgar la pena impuesta.

Dicha sentencia fue apelada por los abogados de los procesados y corresponderá, en segunda instancia,  al Tribunal Superior de Cúcuta confirmarla, rechazarla o modificarla.

El cuarto

Eder Zamir Cetina Rodríguez fue el primero en ser condenado por estos hechos, luego de que aceptara los cargos y llegara a un preacuerdo con la Fiscalía, a 36 años de prisión.

La Opinión