Poco a poco, la Fiscalía fue armando el rompecabezas para llegar a la verdad y hacer justicia. El culpable de la brutal muerte a puñaladas de Mireya Patricia Lazo Argüello fue condenado, ayer, a 18 años de prisión.

La mujer fue hallada asesinada la tarde del pasado 17 de julio en el interior de una casa en construcción en la invasión La Fortaleza, sobre el Anillo Vial Occidental de Cúcuta.

El victimario le propinó con sevicia entre 50 y 60 puñaladas en diferentes partes del cuerpo y escapó.

“La encontraron como a la 1:30 de la tarde, debió estar allí toda la noche y todo el día. La verdad no se escucharon gritos, ni nada. Debieron matarla en la madrugada. Ella quedó ahí tirada. Tenía muchísimas puñaladas. Además, le quitaron la blusa y la dejaron toda ensangrentada a un lado”, comentó, entonces, un vecino.

Desde aquella tarde y sin un solo testigo presencial de los hechos, las autoridades iniciaron las investigaciones para dar con el paradero del agresor y determinar los móviles del crimen.

Para ello, comenzaron a reconstruir minuto a minuto los momentos que precedieron  al crimen de la mujer, quien residía en una finca del Catatumbo y había llegado a visitar a una hija en dicha invasión.  

Poco a poco, fueron reconstruyendo la historia y encontraron que la mujer estuvo, la noche anterior al hallazgo, tomando cerveza  con el agresor y al parecer otras personas en una tienda. Según el dictamen de  Medicina Legal, la hora del fallecimiento coincidía con las horas posteriores a dicho encuentro.

“El hombre y la mujer no tenían ninguna relación. Él se trastornaba cuando ingería licor y ellos habían estado tomando toda la noche. Fue una cuestión de tragos e intolerancia en que se ofendieron mutuamente y él sacó el arma cortopunzante y la apuñaló”, detalló la Fiscalía.

Pasado un mes, y tras entrevistar a 10 personas, las autoridades identificaron al agresor, de quien conocieron que le gustaba andar armado con un puñal. La Fiscalía logró que el Juzgado Segundo Penal Municipal avalara la orden de captura.

Se trata del albañil Carlos Enrique Gutiérrez Altamar, de 30 años, quien al ser presentado ante el juez aceptó haber matado a la mujer, de 40 años, y luego  abandonar el cadáver en el lote. Recibió medida de aseguramiento en prisión. La Fiscalía le imputó el delito de homicidio agravado.

Sentencia

Por aceptar su responsabilidad en los hechos, Gutiérrez Altamar recibió un descuento del 50 por ciento en la pena.

Al Juzgado Tercero Penal del Circuito de Cúcuta le correspondió dictar dicha  sentencia y además lo inhabilitó por 20 años para ejercer funciones públicas.

Al término de la diligencia, el condenado quedó a disposición del Inpec, que lo trasladó a la cárcel de la ciudad, donde deberá purgar la pena impuesta.