El papa Francisco instó el sábado a la comunidad internacional a actuar para dar respuesta a la oleada de inmigrantes que tratan de llegar a las costas italianas en un peligroso viaje desde el norte de África.

"Quiero expresar mi gratitud por el trabajo que hace Italia para recibir a numerosos migrantes que buscan refugio poniendo en riesgo sus vidas", dijo Francisco durante su primer encuentro oficial con el nuevo presidente italiano Sergio Mattarella.

"Es evidente que las proporciones del fenómeno demandan una implicación mayor. No debemos rendirnos en nuestro intento de solicitar una respuesta mayor a nivel europeo e internacional".

El mensaje del pontífice llegó tras una semana en la que se teme que más de 450 personas murieran en el mar Mediterráneo tras naufragar su embarcación y en la que otros 11.000 migrantes fueron rescatados por los guardacostas italianos cuando trataban de llegar a Europa, en un drama que ha provocado fuertes críticas contra la operación de las patrullas fronterizas marinas de la Unión Europea.

Se cree que unas 900 personas han perecido este año en su travesía en barco desde Libia hasta Italia y los últimos informes apuntan a que el año pasado llegaron a Italia al menos 170.000 migrantes.

Las organizaciones humanitarias aseguran que el balance de muertos es mucho más elevado de lo que hubiera sido si Italia no hubiera suspendido la operación italiana de búsqueda y rescate Mare Nostrum el pasado, al no lograr que sus socios europeos la ayudaran a costearla.