El sacerdote venezolano Justo Pastor Arias, quien oficio la eucaristía inaugural de la capilla del Carmen el 16 de julio de 1887, quiso tanto a Cúcuta que su última voluntad fue, emulando al libertador Simón Bolívar, que al morir su cuerpo se quedará en su país, pero su corazón en la capital nortesantandereana.

Y así fue, en la sacristía del templo, en una bóveda, permanece el corazón disecado del religioso, del que se cumplen 190 años de su nacimiento, este 16 de agosto. 

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El padre 

El sacerdote nació en Cordero (Estado Táchira) y, a comienzos del siglo XX, cuando se enfermó, acudía al antiguo hospital San Juan de Dios de Cúcuta, ubicado justo al lado de la capilla, y que funcionaba en las actuales instalaciones de la Biblioteca Pública Julio Pérez Ferrero.
 
El venezolano era tan caritativo que en cada consulta traía un centavo más, para compartir con las personas más necesitadas. 

Además, aprovechaba todo el tiempo que permanecía allí, visitando a los enfermos, principalmente a quienes estaban "de caridad" o tenían enfermedades terminales. 

Así se fue dando la estrecha relación entre el párroco y los cucuteños, que lo llevó a dejar su corazón en la ciudad. 

Actualmente el sacerdote a cargo de la capilla del Carmen es Humberto Nieto.