Hace 27 años no la gana y hace 21 no la juega en su instancia definitiva. Atlético Nacional quiere confirmar que es el equipo más ganador del fútbol colombiano y este miércoles afronta en Quito, contra el Independiente del Valle, el partido de ida por la final de la Copa Libertadores de América.

Los antioqueños, dirigidos por el vallecaucano Reinaldo Rueda, llegan a la final como los candidatos al título, porque fueron los mejores en todas las fases del certamen continental, avanzando en cada una de ellas con autoridad.

Al frente estará un sorpresivo Independiente del Valle, que tiene como hazaña dejar en el camino a los dos grandes de Argentina: River Plate y Boca Juniors.

Desde 1991 no se jugaba una final de Copa Libertadores que no tuviera en cancha a un elenco de Brasil o Argentina, por eso será un partido histórico entre colombianos y ecuatorianos, que se completará el miércoles 27 de julio en el estadio Atanasio Girardot, donde los verdolagas esperan repetir la hazaña de 1989, que sellaron en el estadio El Campín de Bogotá.

“Sabemos de la responsabilidad que implica y que además enfrentamos a un rival de categoría, más allá de que sea debutante en estas instancias. Hay que mirarlo como una oportunidad única que se nos presenta”, aseguró a El Colombiano el entrenador colombiano Reinaldo Rueda.

Para rueda, la clave de que Nacional esté en la final es “el proceso y el trabajo. Como lo he dicho varias veces, esto no es solo mío, es de mucha gente que sembró las bases, el último, el profesor Osorio, y los que estuvieron antes de él. Ese proceso se refuerza con trabajo y conceptos. Además lo muchachos siempre han sido muy receptivos a lo que se quiere y eso genera un gran compromiso con la causa”.

Del rival de la final, el vallecaucano reconoció: “Es un equipo que lleva un proceso casi con los mismos jugadores de hace cinco años, con un técnico que trajo cuatros extranjeros que le han funcionado muy bien. Serán dos encuentros en los que no podemos distraernos por el nombre o el color de la camiseta. Hay que asumirlo con todo el profesionalismo del caso”.

Por su parte, Independiente del Valle también se ilusiona con la Copa: "Nos estamos jugando una final de Copa Libertadores que para nosotros es muy importante. Estoy contento y disfrutando el momento", aseguró el volante uruguayo Mario Rizotto a la prensa local.

En calidad de local, Independiente del Valle marcha invicto en sus 11 partidos, con ocho triunfos y tres empates, gracias a los 17 goles que marcó y porque sólo recibió ocho. Por primera vez en su historia va a recibir a un equipo colombiano por competencias Conmebol y será la cuarta ocasión en que un cuadro ecuatoriano dispute la final de la Copa Libertadores.

Mientras que Atlético Nacional registra 76 compromisos de visitante en el certamen continental, con 23 victorias, la misma cantidad de empates y 30 derrotas. Disputará por tercera vez la final de la Copa Libertadores. Fue campeón en 1989 superando a Olimpia y perdió en 1995 ante Gremio.

El árbitro del compromiso será el paraguayo Enrique Cáceres, quien dirigirá su partido número 22 en la Copa Libertadores y estuvo presente en cinco partidos en éste edición, nunca con Nacional o Independiente, aunque a los ecuatorianos sí los dirigió una vez, contra San Lorenzo de Argentina por la Libertadores 2014 y también en una ocasión a Atlético Nacional, frente a Gremio  en la misma edición.

Bogotá  | Colprensa