Con escaso fútbol y un autogol del rival, Independiente Santa Fe se coronó este domingo campeón de la Súperliga al vencer 1-0 en el estadio El Campín de Bogotá al Independiente Medellín.

A diferencia del juego de ida, en Bogotá los dos equipos salieron con mayor vocación ofensiva, porque Santa Fe buscó dentro del área al argentino Denis Stracqualursi y Medellín engranó mejor su mediocampo con Juan Fernando Quintero, Christian Marrugo y Hernán Hechalar.

Sin embargo, esa vocación ofensiva no se tradujo en goles durante la primera parte del partido, porque David González evitó varias oportunidades para el local y Leandro Castellanos se convirtió en figura de los cardenales, ante los constantes ataques que buscaban a Cristian Nazarit.

Para el segundo tiempo, el entusiasmo ofensivo fue más alto en los locales, que generaron la primera oportunidad clara de gol con Juan Daniel Roa, quien tras una jugada colectiva remató solo frente a González y el balón pasó cerca del palo derecho del arco visitante.

Como Santa Fe inclinó la cancha contra el arco de González en busca del gol, Medellín aprovechó para atacar de contra y se acercó con una opción de Juan Fernando Quintero, quien remató desde fuera del área y Castellanos controló fácil.

Ya en el final, los dos equipos se empezaron a relajar pensando en la definición por la vía con cobros desde el punto penal, por eso el juego se desarrolló en la mitad y con poca presencia sobre las áreas, más allá de centros de costados de los dos equipos que controlaron los defensas.

No obstante, cuando faltaban 11  minutos para el final, un centro que lanzó Ómar Pérez generó el gol en contra de Andrés Mosquera que obligó a los antioqueños a ir en busca del empate en los minutos finales, pero no tuvieron la claridad para vulnerar el arco de Castellanos, entregando el título a Santa Fe.