El partido entre Liverpool y Manchester City, primero y segundo separados por seis puntos, atraerá todos los focos el domingo en el cierre de la duodécima jornada de Premier League, que además tendrá otros juegos de bastante interés. 

Una victoria ante su público en Anfield daría no solo nueve puntos de ventaja al Liverpool sobre su principal rival, sino que pondría la segunda plaza de Manchester City en peligro, ya que Chelsea y Leicester están a dos puntos.

Hay que remontarse a la temporada 2002-2003 para encontrar una victoria del City en el campo de los Reds, y los hombres de Pep Guardiola, privados además de su guardameta brasileño Ederson, lesionado en Liga de Campeones el pasado miércoles, no partirán como favoritos.

Pero un triunfo del City lo colocaría a tres puntos, lo que podría considerablemente cambiar la dinámica de una temporada por el momento bastante discreta.

Por su parte, el Arsenal, quinto con 17 puntos, se desplaza mañana al peligroso campo del Leicester, tercero y que le saca seis puntos de ventaja.

Una derrota, sobre todo si se ve acompañada de una victoria del Chelsea en Stamford Bridge en su derbi londinense contra Crystal Palace mañana, pondría a los Gunners a 9 puntos de las cuatro primeras plazas que abren las puertas de la Liga de Campeones.

Difícil de imaginar al equipo de Unai Emery, cada vez más contestado, que solo ha logrado dos puntos en las tres últimas jornadas, resistir a la forma actual de Leicester que lleva 15 puntos en las seis últimas jornadas, con una sola derrota, con un penal en el tiempo de descuento frente al Liverpool. 

En la parte baja de la tabla, hoy  se disputa el duelo Norwich-Watford, en que el penúltimo recibe al colista, separados por dos puntos. 

Mañana el Everton, 17º con 11 puntos, intentará alejarse de la zona roja en su desplazamiento al campo del Southampton (18º), al que aventaja en tres puntos.