Fundado en 2009, ascendido a la primera categoría cuatro años después, campeón del fútbol rumano en 2017 y reciente luchador en la Liga de Campeones. Así es el modesto Viitorul Constanta FC, una escuadra fundada, presidida y dirigida por una exestrella del mejor fútbol de la década de los 80 y 90, que logró su máximo brillo en el Real Madrid y en el Barcelona. El Maradona de los Cárpatos, así se le conoce al rumano Gheorghe Hagi, de 52 años, que en su mejor época se convirtió en leyenda al ser considerado uno de los más  destacados volantes ofensivos. Gheorghe también jugó con su selección cuatro mundiales (1990, 1994 y 1998). En el de Francia-98 alcanzó a cruzarse con el Pibe Valderrama en un partido ante la flamante Selección Colombia, que los rumanos ganaron 1-0.

En 2017 volvió a escribir historia, pero esta vez siendo el timonel de un club que él fundó hace ocho años y que junto con un puñado de jóvenes consiguió, nuevamente, el cariño de toda su nación alcanzando el logro de ser los campeones más jóvenes de Europa.  

Haciendo historia

La idea de fundar un equipo nació en  2009, en la pequeña ciudad de Ovidiu, que con sus apenas 13.134 habitantes, acogió el ambicioso proyecto como suyo.

Desde el inicio, ‘Gica’, como también se le conoce a Gheorghe, se puso al frente del recién nacido club como presidente y entrenador a la vez. No pasó mucho tiempo antes de que  once empezara a llenar su estadio, donde apenas caben 4.500 espectadores.

Pero la creciente fama del Viitorul en Rumania empezó gracias a su escuela, que incluso, al día de hoy, es comparada con la Masía del Barcelona. Al menos 300 canteranos alimentan al equipo principal, donde además, sus jugadores titulares no superan los 20 años y solo cuentan con un extranjero en la plantilla. Ese mismo equipo fue el campeón de la élite rumana, el pasado 14 de mayo. 

Campeones de Rumania

Después de su creación, solo tardó cuatro años en llegar a la primera división. En 2013, el prometedor equipo ascendió, y cuatro años más tarde, de la mano de Hagi, consiguió el polémico título, que a su vez le dio un pase a la Liga de Campeones de este año.

Los jóvenes de 17, 18, 19  y  20 años hicieron una sorprendente campaña el semestre pasado- hoy ostentan el quinto puesto de la tabla con 29 puntos, a nueve del líder, el Steaua-, y llegaron a las instancias finales codeándose con el FCSB Bucarest. En el último partido, los dirigidos por ‘Gica’ ganaron 1-0 al CFR Cluj gracias a un penalti sobre los 65 minutos de juego. Por su parte, el Bucarest goleó 3-0 al Craiova.

Ambos equipos acabaron igualados en puntos, pero al final la liga de fútbol de ese país decidió que el campeón era el joven Viitorul. Luego de eso, los vencidos aseguraron llevar el caso hasta el Tribunal Arbitral del Deporte, sin embargo, al día de hoy el título tiene el nombre del Viitorul Constanta.
 
Futuro en rumano

La palabra Viitorul significa “futuro” en rumano, y haciendo honor a su nombre, no solo es el equipo más joven de Europa en levantar el trofeo de una liga, sino que le debe todo su valor al desarrollo de pequeños talentos en la ‘Masía Rumana’. 

“Somos los campeones más jóvenes de Europa. Pero detrás de este increíble éxito hay una fuerte academia. Siempre les digo a los jugadores que yo tuve talento, pero también ambición. Esto hace la diferencia”, dijo Hagi después de ganar el título. Según la leyenda, su mayor inspiración como entrenador es el holandés Johan Cruyff.

“Hemos sido campeones de la categoría júnior durante cinco años seguidos y ahora lo hemos logrado con el primer equipo”, aseguró Hagi en entrevista con el canal Digi Sport. “En la vida, cuando se tiene un concepto técnico, cuando se tiene una visión saludable, se puede alcanzar el éxito, nada es por casualidad”, agregó.

Con el logro, Gheorghe también aprovechó para instar a su país a invertir en la juventud. “Es la única forma en la que podemos crear una nueva generación de jugadores, como la mía, que puede competir con cualquiera”, dijo Hagi al diario británico The Guardian. “Tal vez podemos formar una mejor todavía. Ese es mi objetivo”, finalizó la exestrella que, en ese partido ante Colombia donde se midió con el Pibe –ambos con la camisa 10- protagonizó la asistencia que le dio el triunfo al combinado rumano.