La Asociación Colombiana de Futbolistas Profesionales (Acolfutpro) presentó este martes ante el Ministerio de Trabajo una petición para buscar un diálogo con la Dimayor y la Federación Colombiana (FCF) con el fin de solucionar varios puntos críticos con respecto a los jugadores en el país; que de no darse, podría llevar a un paro.

Han sido varios años los que Acolfutpro ha estado detrás del reconocimiento por parte de los directivos del fútbol colombiano, quienes se han negado a concertar puntos como calendario de competencias, descansos, vacaciones, el estatuto del jugador, el código disciplinario, la Liga Femenina y pólizas complementarias, entre otras.

“El punto más crítico es que ellos no quieren reconocer formalmente a la Asociación de Futbolistas como representante de los jugadores, lo cual es absurdo”, aseguró Carlos González Puche, representante de la Asociación.

Además, González comentó que ni Dimayor ni la Federación están interesados en abrirle la puerta a los futbolistas porque saben que tendrían que compartir el negocio.

“Eso fue una recomendación que le dieron a los directivos desde el 2005, que el día en que nos reconocieran firmando un papel ya podríamos ser parte de todo, de la repartida de los beneficios. La mayor dificultad es que ellos no quieren compartir ni un ápice de alguna determinación que ellos tomen sobre el fútbol colombiano, es una resistencia al cambio, a abrir espacios a otros actores dentro del espectáculo del fútbol como se hace en otros países”, añadió González.

Tras la petición ante el Ministerio de Trabajo, este debe solicitarles a los dirigentes que se reúnan con Acolfutpro para comenzar a trabajar en todos esos puntos flacos que tiene actualmente el fútbol colombiano. Si el llamado no es atendido, los jugadores tendrían el derecho al paro.

“Lo que pedimos es que se sienten a concertar. No se necesita ser un sindicato para estar allí. Eso es mera forma, en el derecho laboral el contenido es más importante que la forma”, añadió González Puche.

Además, sobre la posibilidad de que el fútbol colombiano entre en paro, agregó: “nosotros estamos agotando las instancias. Esta situación la conocen las autoridades, las peticiones están divulgadas. La invitación es a sentarse, pero si no quieren los jugadores tenemos derechos y haremos uso de las acciones legales que correspondan, nacional e internacionalmente”.

Pero no todo acaba allí, para González Puche la posición que tienen actualmente los dos grandes entes del fútbol nacional se debe a que se incomodan con las denuncias, especialmente con la más reciente en la que el fútbol femenino fue protagonista.

“Los directivos están muy afectados por la forma cómo se denunció el tema de abusos y discriminación a las mujeres futbolistas. Ellos creen que esas denuncias acaban con el negocio, así lo estén haciendo mal”, concluyó.