La vida de Brayan Stiven Ibargüen y Larry Aldair Araque cambió drásticamente en diciembre del año pasado, después de jugar un partido amistoso contra una de las categorías menores del club River Plate de Argentina, en el Torneo Internacional Cartagena de Indias, que reunió a 50 clubes de Colombia y el exterior.

Ambos jugadores, que para ese entonces pertenecían a La Gloriosa Academia FC, de Cúcuta, fueron observados por un representante del Parma de Italia, que inmediatamente se interesó en el talento de los dos cucuteños.

En menos de dos meses, los futbolistas pasaron de la Gloriosa Academia a la filial oficial del Parma en Colombia, cuya sede está ubicada en Barranquilla.

Adaptados y con opciones de seguir creciendo

Ambos, coinciden en afirmar que lo más difícil de irse a Barranquilla ha sido dejar en Cúcuta a sus familias, pero por otro lado están absolutamente convencidos que el “sacrificio vale la pena”.

“Vivir lejos de mi familia no ha sido fácil. Estas son cosas que pasan en el fútbol y es la primera vez que salgo de mi casa, pero es por algo que yo quiero”, sostiene Brayan Ibargüen, un volante ‘10’, de
16 años, con buena pegada y gran capacidad para asistir a sus compañeros.

Ibargüen, que tiene como referente al francés Pogba, no pierde su enfoque de llegar a triunfar al fútbol del exterior, y sabe que su proceso con el Parma va por buen camino.

Los cucuteños ya cumplieron su periodo de adaptación, y han recibido buenos comentarios del cuerpo técnico y los ojeadores italianos, que ya planean mostrarlos en varios clubes del viejo continente.

Por su parte, Larry Araque tiene 14 años y se desempeña como defensor central, con gran técnica y capacidad para salir jugando, y su formación como futbolista empezó en Cúcuta con la Real Sociedad.

Después hizo parte de una convocatoria para conformar  las divisiones menores del Cúcuta Deportivo, y en vista de que ese proyecto naufragó, pasó a integrar La Gloriosa Academia F.C, que dirige el profesor Ander Peterson.

De Parma a Udinese

La buena noticia para ambos cucuteños es que la filial del Parma en Colombia, en donde juegan, pasará a ser propiedad del club Udinese, de Italia, y esto les abriría mayores posibilidades de cumplir su sueño en el fútbol europeo.

El director técnico de La Gloriosa Academia explicó que para los dos juveniles el cambio es muy favorable, pues el dueño del Udinese, el empresario Giampaolo Pozzo, es también propietario del Granada de
España y el Watford de Inglaterra, clubes donde también podrían llegar los futbolistas cucuteños.