Esta semana el gobernador del Táchira, José Vielma Mora, dio a conocer apartes de la reunión que se llevó a cabo en Quito entre los presidentes de Colombia y Venezuela, Juan Manuel Santos y Nicolás Maduro.

Lejos de dar detalles sobre los consensos a los que llegaron los dos mandatarios, habló públicamente sobre las irregularidades que a su parecer, las autoridades colombianas esconden en esta crisis fronteriza que ya completa más de un mes.

“En Colombia hablan de deportaciones y maltratos, nosotros hablamos del desplazamiento de hermanos colombianos y de cómo su gobierno y sus autoridades militares y policiales prácticamente los arrojan al lado oriental del río Táchira y lanzan a los colombianos a vivir en Venezuela, porque es la única opción”, dijo el mandatario.

Así mismo calificó de aberrantes las imágenes de familias enteras realizando mudanzas y llevándose sus pertenencias a través del río Táchira y denunció que “cuando llegaron con sus cosas al lado colombiano, les cobraron impuestos, les cobraron ‘vacuna’”.

Respecto a las pertenecías de los connacionales que quedaron al otro lado tras las deportaciones, Vielma señaló que quienes deseen llevar a Colombia sus enseres, deben realizar una solicitud de mudanza ante la alcaldía correspondiente. “Van a la frontera, hacen una declaración de aduanas y llevan legalmente sus menajes y equipajes”.

Lo que no precisó es cuál será el mecanismo que permitirá a estas personas entrar nuevamente a Venezuela para realizar tales trámites, pues la frontera permanece cerrada.

En este mismo espacio, el gobernador tachirense negó las denuncias de organismos oficiales de Colombia sobre la existencia de 299 niños separados de sus padres, y agregó que su gobierno ha recibido varias comisiones, tanto colombianas como internacionales, para verificar esta situación. Asegura que hasta ahora no se ha podido demostrar que sean reales las cifras.

Por otro lado, Vielma Mora  dijo que Colombia debe explicar sus denuncias sobre las incursiones de tropas y aviones venezolanos a su territorio, y afirmó que estas forman parte de “la contaminación internacional sobre Venezuela; y que no hay violación sobre el espacio aéreo colombiano”.

Además, denunció que el alcalde de Cúcuta, Donamaris Ramírez, inventó que unos guardias fueron para allá y quemaron una parte de la frontera colombiana; indicó que esta acción es falsa, pese a que los residentes de la vereda Los Negros en el corregimiento de Ricaurte hablan de constantes incursiones militares en este sector.

Inconformidades económicas y de comunicación

Vielma Mora insistió en que la resolución que permite establecer el valor de la relación peso-bolívar en la frontera colombiana debe ser derogada (Resolución 8) y agregó, exigirá la eliminación de los 1.580 cambistas que hay en Cúcuta.

También planteó vender la gasolina a precio internacional. “No queremos seguir vendiendo gasolina a 0,70 bolívares por litro ni a 83 bolívares por litro”, indicó.

De igual forma resaltó que los productos alimenticios, de tocador y de limpieza que se vendan a Colombia, deben tener precios internacionales, porque los subsidios que da el gobierno venezolano son para sus compatriotas.

Por otro lado, Vielma Mora dijo que William Castillo, director de Conatel, evaluará que la señal de las radios venezolanas tengan penetración hacia Colombia “y no solamente tener que escuchar emisoras colombianas, con locutores, comerciales y música de este país”. Aseguró que están evaluando el contenido de las cableras, para “que salgan del espectro electromagnético ondas hertzianas de las radios y televisoras colombianas que hacen un daño terrible en la frontera”.

“Estas situaciones violan normas internacionales del espectro electromagnético en Táchira, y llevaremos esto a instancias internacionales”, agregó. “Nosotros tenemos que empezar a respetarnos, esa es la nueva frontera de paz que queremos”, finalizó.