En Cúcuta se genera una diversidad de historias movidas por la realidad fronteriza, donde centenares de colombianos y venezolanos se integran buscando nuevas oportunidades de vida. 

En ese proceso, inmigrantes y retornados son rechazados, hecho al que se le dará una mirada desde al arte esta semana en aquí, por medio de debates y una instalación de fotografías de gran formato en el espacio público.

El jueves es el Día Mundial del Refugiado y por iniciativa de la plataforma El derecho a no obedecer, proyecto de la Corporación Otraparte, se hará la toma cultural en Cúcuta por la integración ciudadana.

“Durante la semana se impulsarán reflexiones alrededor de la movilidad humana, explorando las historias que se tejen en torno a ella. Como plataforma estamos en Bogotá, Cali, Medellín y Cúcuta y la apuesta en la frontera se da desde la línea de Migración y ciudadanía”, dijo Lilibeth Villamizar Rojas, coordinadora en Cúcuta de la plataforma.

Las actividades tienen el apoyo de la Fundación Plan, de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) y de Inside Out Projec, proyecto de arte participativo que ha reunido a más de 260.000 personas en 129 países buscando generar transformaciones sociales a través del arte.

Esta última tiene como facilitador al artista cucuteño Luis Germán Gómez, quien dijo que Inside Out Projec permite que las comunidades den a conocer sus necesidades y sueños, convirtiéndose en un instrumento en Cúcuta para que los inmigrantes, los refugiados, los colombianos retornados y la población local interactúen y tomen consciencia de que “todos somos iguales y lo que nos une no tiene fronteras”.

En diciembre pasado, el equipo del proyecto empezó a recorrer zonas vulnerables de Cúcuta como Scalabrini, el Hogar de Paso La Divina Providencia y los barrios Manuela Beltrán y Las Delicias, donde conviven ciudadanos de Colombia y Venezuela.

En estos sectores se tomaron más de 200 fotografías que desde anoche se empezaron a instalar en el espacio público como parte de un ejercicio para reflexionar desde el arte y que tanto colombianos como venezolanos se sientan identificados con esos rostros.

Los sitios donde estarán las fotografías son los puentes Carlos Ramírez París (San Mateo), debajo del Elías M. Soto (avenida Los Libertadores) y en la plazoleta del Ventura Plaza (donde está el mensaje de Yo amo a Cúcuta).

En ese último espacio se hará el lanzamiento del proyecto el próximo jueves a las 4 de la tarde, con presentaciones musicales, de teatro y además se darán a conocer experiencias exitosas de integración.

Las fotografías permanecerán en el espacio público varias semanas y el viernes en Casa Morada (barrio Motilones), culminan las actividades con un ‘guayoyo’ (café) con los panas, compartiendo historias de ambos lados de la frontera.