La tarde de este jueves llegó al coliseo del Colegio Municipal de Cúcuta el ministro de Defensa Luis Carlos Villegas en compañía del Director de la Policía Nacional, general Rodolfo Palomino, y el general Juan Pablo Rodríguez Barragán, comandante general de las Fuerzas Militares, para conocer la situación de los deportados.

En su corta visita, el ministro condecoró al soldado Óscar Ferrer por su valentía y oportunidad al salvar a un menor de dos años que cruzaba por el río Táchira, intentando llegar a territorio Colombiano. La intendente jefe de la Policía Claudia Carrillo también fue homenajeada por una acción similar.

Además, Villegas anunció que van a intervenir los 47 pasos ilegales que han encontrado en la frontera colombo-venezolana.

Para esto, dijo que ya cuenta con 400 efectivos para supervisar esos puntos y que se está reforzando la seguridad desde ahora. "Esperamos que el gobierno de Venezuela proceda rápidamente a la apertura de los puntos fronterizos; el delito no transita por allí".

El ministro enfatizó que en Colombia no hay paramilitares, sino bandas criminales y desean contar con la colaboración del país vecino para combatirlas.

Agregó que por Norte de Santander no han ingresado más deportados, pero que este jueves entraron por Paraguachón 40 colombianos devueltos por las autoridades venezolanas.

Finalmente, dijo que en revisión de los albergues encontró que las personas han podido traer gran cantidad de sus pertenencias y que están recibiendo las ayudas del Gobierno. En esta oportunidad, Luis Carlos Villegas entregó kits con útiles de aseo a algunos deportados.

(Soldado Óscar Ferrer, condecorado por el ministro. Foto: Alfredo Estévez.)

La historia del menor rescatado

Un niño de dos años fue rescatado este miércoles por un miembro del Ejército Nacional, en la frontera que comunica al Táchira con el corregimiento La Parada.
 
“Yo escuché un llanto y cuando volteé a mirar, vi a un niño como de unos dos años. Estaba solito y enseguida pensé en mi hermanito. Fui hasta donde estaba y cuando lo alcé, dejó de llorar”, expresó Ferrer este miércoles a los medios de comunicación.

El soldado que tiene 18 años y hace cuatro meses hace parte de la Brigada 30 del Ejército, pidió a los uniformados que lo dejen seguir su carrera militar.

Él es uno de los 200 soldados de la Segunda División que acompañan a los nacionales que vivían en el vecino país.

“El niño estaba –dice Ferrer– con el agua hasta la cintura. Busqué a familiares o algún conocido, pero no encontré a nadie que pudiera conocerlo o que me diera razón de su familia. Por eso lo dejamos con los funcionarios de Bienestar Familiar”.

(La intendente jefe de la Policía Claudia Carrillo ayudó a reencontrar a un joven especial con su padre.)

*Redacción Laopinion.com.co